Productos que nunca deberías comprar si vas al Lidl

Aunque Lidl es uno de los supermercados con más reputación por su magnífica relación calidad-precio, no todos los productos de la cadena alemana son los más recomendables para el consumo. Algunos lo son por precio, y otros por sus componentes. Si vas a preparar tu próxima lista de la compra, toma nota de estos productos que sus usuarios no recomiendan comprar en Lidl. Además de productos de alimentación, también hay algunos representantes de su buque insignia: Cien, la marca blanca de cosmética y parafarmacia alemana donde cuenta con grandes éxitos, sí, pero también algunos importantes fracasos. Estos son los productos que nunca deberías comprar si vas al Lidl.

EL SUSHI DE LIDL, DEMASIADO ARTIFICIAL

EL SUSHI DE LIDL, DEMASIADO ARTIFICIAL

El sushi ha dejado de ser una moda para formar parte habitual de los menús de los españoles. La popularidad que alcanzó a principios de los años dos mil se ha traducido en que en todos y cada uno de los supermercados, con mayor o menor variedad y calidad, hay sushi para llevar (y comprar). Lidl no ha sido menos, y ha incluido en su catálogo de productos algunas variedades de sushi, tanto fresco como congelado.

En ambos casos, el resultado no ha sido el deseado. Aunque el sushi refrigerado tiene algo más de sabor y naturalidad, no se puede comparar a ninguno del que ofrecen los competidores. Sí, en precio resulta mucho más competitivo, pero en sabor no tiene nada que ver. Ni la textura. Entre los consumidores, la queja habitual tiene que ver con un sabor algo artificial. Da igual que el roll se desmenuce, que el arroz no se muele. Por esta razón, es uno de los productos que no se recomiendan comprar en la cadena de origen alemán.