Un empresario de 10 hace estas cosas

Si tienes un negocio o deseas tener uno, el sueño de todo empresario es cómo saber hacer las cosas bien para conseguir el éxito.

Muchas veces no se trata de cómo hacer las cosas en los diferentes ámbitos de la vida o empresa, sino en saber cómo actuar desde nuestro interior. Para conseguir avanzar, aunque sea pasito a pasito, existen algunos puntos clave que debemos tener en cuenta y no perder el éxito por el camino o jamás llegar siquiera a rozarlo con los dedos.

Sabemos que para convertirte en alguien importante hay que trabajar duro, ser perseverante. Pero esto es solo la punta del iceberg. Aún hay muchas más habilidades que deberás tener para poder convertirte en lo que quieres ser (y que todos te acojan y apoyen).

Saber gestionar el tiempo

gestionar tiempo

Lo primero que debe saber hacer alguien exitoso es gestionarse el tiempo. No andar estresado de acá para allá, sino tomarse las cosas con calma sabiendo que las puede terminar todas.

Esta es una de las habilidades que más se requieren para un empresario. También una de las que más se valora. De hecho, es así porque no tiene una fórmula mágica, sino que cada persona tiene el don o no de saber hacerlo y controlarlo a la perfección.

Si aún no has dado con la clave de cómo hacerlo no te preocupes. Empieza por desarrollar, paso a paso, un sistema que te sirva para organizarte. A ti. Sin pensar en nadie. No intentes abarcar demasiado y tampoco permitas mantenerte ocioso demasiado tiempo. En el equilibrio se encuentra la clave.

Empatía con sus empleados

empatía empresario

Una de las cualidades humanas que resultan fundamentales en la vida diaria, pero mucho más en el ámbito empresarial es la empatía.

En ella reside la clave para que un negocio, y por tanto un empresario, consiga o no alcanzar el éxito. La empatía es esa capacidad de sentir lo que los demás, de ponerte en sus zapatos. Es importante porque permite una capacidad extra que no tienen aquellos que tan solo piensan en sí mismos.

Será necesaria tanto para poder entablar conversaciones con tus empleados, como para poder saber qué necesitan los clientes. Aquellos que saben ponerse en el lugar del otro tienen ya una enorme parte ganada.

Domina el cansancio

cansancio

Esto es algo que muchos no tienen en cuenta y es por eso que no consiguen dar el gran paso como empresarios exitosos.

Sabemos que cuantas más responsabilidades, más trabajo. Y cuanto más trabajo menos tiempo para dedicarnos a nosotros mismos. Pero hay que saber repartirse las tareas para siempre poder tener un tiempo para poder descansar de forma adecuada.

Hay gente que necesita dormir 8 horas diarias y otros que con unas pocas ya se encuentran a tope. Lo importante es conocerte a ti mismo, tanto tus límites como tu aguante, para poder hacerte un plan personalizado en el que nunca olvides descansar lo necesario para afrontar cada día a pleno rendimiento.

Pide ayuda cuando lo necesita

pedir ayuda

Nadie es un super héroe. Todos necesitamos ayuda en algún momento de nuestra vida. Sí también el empresario más exitoso.

De hecho, quizá este lo sea porque ha recibido ayuda cuando la ha necesitado y se ha centrado en lo verdaderamente importante. Es una habilidad complicada, pues pensamos que al pedir ayuda mostramos nuestro lado más débil. Sin embargo, esto no es así para nada.

Según un estudio de la Escuela de Negocios de Harvard, pedir ayuda te hace ver más capaz, y no al contrario. Cuando pides consejo tienes en tu poder información compartida por personas con más experiencia. Y por tanto menos probabilidades de equivocarte.

Persiste y se mantiene positivo

perseverancia, positivismo empresario

La persistencia y perseverancia son vitales para poder darlo todo en un proyecto. A cualquier nivel, no solo cuando emprendes tu propio negocio.

Es necesario para poder alcanzar esas metas y objetivos que nos hemos propuesto. Si no eres persistente, abandonarás el objetivo cuando ocurra el menor de los contratiempos. Además, ten en cuenta la importancia de seguir trabajando una vez hayas alcanzado el éxito, pues este no se mantendrá solo.

Una actitud positiva ayuda mucho a un gran empresario. Que no te importe demasiado lo que otros puedan pensar o decir de ti. Eso sí, ten siempre en cuenta tu propia opinión. La confianza es vital para estar al frente de cualquier proyecto de vida, mucho más en el ámbito empresarial.

Es honesto y sabe cuándo callar

honestidad

Que no mientas no quiere decir que seas del todo honesto. Es muy sencillo poder caer en ciertas situaciones a la hora de comenzar un negocio.

Estas pueden ser, por ejemplo, evitar la pregunta de si cuentas con experiencia, prometer demasiado o no ser sincero sobre si puedes o no cumplir con un acuerdo. Esto te llevará directo a un pozo sin fondo. Si eres honesto y siempre vas con la verdad por delante, tendrás mucho menos que temer. Admite errores y soluciónalos, eso es lo que distingue a un buen líder.

Si tus palabras no van a mejorar el silencio, mejor no las digas. Toma este consejo en cuenta sobre todo si estás enfadado o molesto. En caliente, puedes decir algo de lo que más tarde te puedas arrepentir. Y eso en un negocio puede ser fatal.

Mantiene a raya sus pensamientos

control pensamientos

Otra de las habilidades más comunes que presenta un empresario de éxito es saber dominar sus pensamientos.

Esto es necesario para conseguir lo que quieres o hacer eso que te lleva tanto tiempo rondando la mente. Los pensamientos son el producto de nuestras experiencias pasadas, por tanto, tenemos que aprender a dejarlos a un lado. Lo que nos interesa es abrazar el futuro y no ahogarnos en un pasado que no podemos olvidar.

Cuando quitas ese bloqueo de tu mente estás preparado para mirar tan solo hacia delante, lo que se traducirá en poder alcanzar el éxito.

Presta atención a cada detalle

prestar atención

En el común de los mortales, la mente se pasa divagando una gran parte del día. Pero esto es lo que debes aprender a controlar.

Más de la mitad de nuestro tiempo estamos pensando en cosas diferentes de las que estamos haciendo y esto nos perjudica en el ámbito laboral. Un empresario de éxito debe disfrutar con lo que hace, poner toda su atención y conseguir un resultado de 10.

Esto también se traducirá en nuestra felicidad, pues comprobaremos que, por fin, lo hemos conseguido.