Como todas las hijas, la princesa Leonor sigue el ejemplo de su madre, la Reina Letizia. Sabiendo lo maniática que es Doña Letizia y lo mucho que le gusta controlarlo todo, seguro que su hija, no escapa de su control y que pasa mucho tiempo con ella.
Sabiendo que la princesa Letizia está destinada a convertirse en la futura Reina de los españoles, su educación y comportamiento es vigilado hasta el último detalle. Nada va a quedar al azar, y menos con la Reina por medio.
Aunque se guarda mucha privacidad en el caso de Leonor y Sofia, podemos ver que algunas manías de Doña Letizia ya se están contagiando.
Saltarse el protocolo
Letizia es muy nerviosa y activa y a veces tiene tanta prisa por quitarse las obligaciones de en medio que muchas veces se ha saltado el protocolo. Su hija, que la tiene como ejemplo a seguir, puede heredar fácilmente esa manía de hacer lo que la venga en gana.
Desde no colocarse en su sitio a evitar hablar con alguien a quien no tiene mucho aprecio, o cortar una conversación, son manías que Leonor no debería aprender.
Leonor debe aprender pronto a comportarse en público y a guardar la etiqueta y las normas de educación que corresponden en cada caso, porque todos los ojos están puestos en ella. Si no cumple lo que se espera de la Princesa, la imagen de la monarquía puede verse aún más dañada.
