El agua es un elemento vital para cualquier ser vivo. Las personas necesitamos consumirla, porque entre otras cosas estamos compuestos por ella. Tan solo el 40 % de tu cuerpo no es agua.
Puede ser que pienses que bebes agua suficiente, pero resulta que no toda la que ingieres se queda en tu organismo. Cuando sudas o vas al baño a orinar pierdes líquido, por ejemplo.
Muchas veces no sabes lo afortunado que eres por haber nacido en un lugar en donde abres el grifo y sale agua. Hay países subdesarrollados en los que las personas tienen que hacer auténticas maravillas para poder conseguir un poco. Y los que la consiguen pueden morir de diarreas a causa de que esté contaminada.
Como no es tu caso te diré que bebas toda el agua que puedas. Se recomienda tomar mínimo dos litros y medio al día. Aunque todo dependerá de cada persona, hay quien bebe más agua y quien no tolera más de los dos litros.
Algunas de las cosas que le suceden a tu cuerpo si no bebes la suficiente son:
Ralentizas el cerebro
El cerebro es un 70% agua, con lo que si no bebes la suficiente y te deshidratas este tiene a encogerse dentro de tu cabeza.
Cuando el cerebro se encoge hay estudios que demuestran que tu reacción normal ante un problema se ralentiza en comparación a cuando estás hidratado.
Lo bueno es que cuando tomas otra vez líquido el cerebro vuelve a su tamaño original.