Con la llegada del internet y las redes sociales, los emprendedores y las nuevas empresas se enfocan en desarrollar sus empresas enteramente en internet sin importar lo que ofrezcan. No obstante, por más importante que sea la presencia en línea para un negocio, hay que considerar la opción de tener una tienda física para marcar una diferencia entre otros negocios virtuales. En este artículo conocerás algunas ventajas que te harán tomar la decisión de alquilar tu propio local para establecer allí tu empresa.
Para quien tiene muy poco tiempo comenzando con su negocio se le puede entender que no cuente con los medios necesarios para alquilar un local, pero todos aquellos que ya tienen tiempo trabajando y poseen una marca establecida y conocida en la localidad el tener una tienda puede marcar toda una diferencia desde el simple hecho de ya no ser una “marca” más del montón que consigues en cualquier red social.
Por un lado, tener una tienda significa que has decidido salir del molde del internet en el que se pueden quedar estancadas muchas marcas. Aunque se puede mantener el éxito teniendo una tienda completamente virtual, cuando la llevas a un plano físico estás diciendo que te tomas en serio lo que haces y que lo quieres llevar más lejos de lo esperado. Incluso, si todo sale bien es posible que puedas tener más de una tienda debido a la gran cantidad de locales disponibles en España, y lo que en un principio comenzó como un pequeño proyecto de internet se pueda convertir en una cadena de tiendas populares en tu ciudad, todo el país, o el mundo entero.
Por el otro lado, existen personas que, sabiendo lo cotidiano que se ha vuelto el internet y su uso diario, temen comprar en internet productos o servicios y por eso prefieren la seguridad de tener el producto a la mano o ver cómo funciona el servicio en vivo, así que ¿qué mejor que yendo a tu local físico? El tener un local significa que podrás acceder a un nuevo público que prefiere comprar en tiendas físicas y evitar la inseguridad que muchas veces da el internet.
En resumen, alquilar tu propio local requiere de tiempo y de hacer una gran inversión, pero a cambio obtienes un mayor reconocimiento entre compañías de tu misma industria que han preferido la comodidad del internet y el atraer nuevos clientes está simplemente asegurado para ti. Investiga cerca de tu zona locales que te llamen la atención y que estén de acuerdo a tu presupuesto para que, poco a poco, puedas tener esa tienda de ensueño para tu compañía.