El año 2020 es la fecha límite para que Renfe deje de tener el monopolio del transporte de viajeros nacionales. Pero la llegada de competencia más que un “estímulo” para la compañía es un problema pues tiene que acoplar la plantilla al futuro del sector. Motivo por el cual ha lanzado el cuarto plan de bajas voluntarias para un máximo de 805 trabajadores.
Renfe “aguarda con muchas expectativas” la futura liberalización del sector, tal y como aseguran fuentes de la compañía ferroviaria a Merca2, que no dudan en considerarlo “un factor de estímulo y de oportunidad para mejorar los servicios”.
Sin embargo, prepararse para la llegada de competencia implica adelgazar la estructura de la empresa. Este plan de bajas afectará de esta forma al 5,8% de la plantilla de unos 13.720 empleados y se llevará a cabo este año. De estos 805 puestos de trabajo, se podrán sumar hasta 208 maquinistas, 119 comerciales y otros 103 operarios de talleres.
Se trata del Plan de Desvinculaciones para 2018, que este año solo ha contado con el visto bueno de los sindicatos SEMAF y UGT (mayoría suficiente para llevarlo a cabo). CCOO y CGT no están dentro de este. Además de las bajas, también se acordaron los criterios para confeccionar un listado ordenado con las 1.711 solicitudes de adhesión recibidas, según fuentes sindicales.
Pero no es el primero. En 2015 la misma medida afectó a 500 trabajadores de la compañía, mientras que en 2016 y 2017 creció a los 750 por año. Una medida que se pactó con los sindicatos a través de un plan que vincula las salidas voluntarias de personal con la incorporación de nuevos efectivos.
La idea es rejuvenecer la plantilla, cuya edad media es de 54 años, y a su vez adelgazar su estructura. “Con esta acción, se facilita la salida de trabajadores que llevan 40 años en la empresa y se permite la renovación y rejuvenecimiento de la plantilla”, explican dese CGT. De ahí que Renfe lanzara en 2017 la mayor oferta de trabajo desde 2005 para cubrir 675 empleos, casi todos maquinistas. Aunque para 2018 no se ha aprobado nuevas ofertas de empleo.
Renfe: camino a la liberalización
A finales de 2016, el Parlamento Europeo aprobó la liberalización definitiva del sector ferroviario. Algo que implica romper con los monopolios ferroviarios en la UE. En España, Renfe deberá hacer eso mismo y abrir el transporte de pasajeros al resto de la competencia, incluidos el AVE y los Regionales.
“El proceso de liberalización le corresponde Fomento y al Gobierno”, según explican desde Renfe a Merca2. No obstante, empresa y Ejecutivo están alargando en el tiempo la apertura del sector. “Creemos que la liberalización está aún por definirse en el Ministerio y no saben cómo acometerla”, denuncia desde el sindicato CGT. Y es que en cinco años el Gobierno no ha avanzado nada.
Entre otras cuestiones, la entrada de competencia implicaría la caída del precio de los billetes. “La sociedad tiene mucho que ganar por el desarrollo de la competencia en el ferrocarril. Desde la oferta de nuevos servicios en nichos de mercado no explorados hasta la presión por la mejora de la calidad que supone contar con un rival”, explica Javier Asensio, profesor de Economía Aplicada de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB).
De ahí que desde Fomento se estén poniendo trabas a la entrada de cualquier rival, incluso en rutas internacionales. El Ministerio liderado por Iñigo de la Serna ha interpuesto un recurso ante la Audiencia Nacional para paralizar la puesta en marcha del proyecto de Air Nostrum que poner en marcha un AVE entre Madrid y Montpellier.