Los dos últimos veranos han sido bastantes duros para Vueling, la aerolínea que forma parte del grupo IAG. Pero si cabe, el pasado 2016 fue doloroso para su imagen debido a los retrasos y caos que hubo en torno a su gestión. Y ahora es cuando paga los excesos de esa borrachera de quejas y reclamaciones.
Además por partida doble. Lo más reciente tiene que ver con las estadísticas de tráfico que ha publicado IAG sobre las compañías que engloba bajo su marca. De ellas, Aer Lingus e Iberia presentan aumentos en la cantidad de viajeros transportados, así como los asientos ofrecidos durante el mes de julio. Mientras, British Airways salva los muebles con leves caídas; pero la que no se escapa de una gran falta de confianza es Vueling.
La compañía presidida por Javier Sánchez-Prieto tuvo un ratio de pasajeros por kilómetro transportado (PKT) de 3,3 millones; mientras que la oferta de asientos (AKO) fue de 3,6 millones. El descenso frente al mes de julio de 2016 fue de un 4,4% y un 7,4%, respectivamente.
Pero aquí no acaban los problemas para Vueling. Hace unos días, cuando IAG presentó los resultados del primer semestre del año, todas las marcas tuvieron unos resultados positivos menos ellos que registraron unas pérdidas de 6 millones, inferiores -eso sí- a los 54 ‘kilos’ del ejercicio anterior. Por lo tanto, ahora mismo habrá miradas de desconcierto por las malas cifras de Vueling, aunque las causas no están muy claras.
¿Sigue la borrachera de Vueling?
¿Y qué está pasando este año? Por el momento, y cuando vamos por la mitad del verano, más o menos, no se están dando grandes caos que afecten a Vueling de manera directa.
Como caso representativo, y que ha tenido eco mediático, ha habido unos problemas concretos y localizados en un vuelo con destino a Madeira (Portugal). Aunque todo parece indicar que ha sido algo aislado y que están lejos de repetirse los episodios del año pasado.
De hecho, como se puede ver en las quejas a través de redes sociales, se dan situaciones de retrasos, en muchos casos injustificados, pero que no parecen ir más allá.
Gracias @vueling por volverme a joder las vacaciones. Desde las 9 en el aeropuerto y de momento sin noticias #putavergüenza #enseñamelapasta
— Laura Fa (@Laura__Fa) 28 de julio de 2017
Hola @vueling, después de 30min parados dentro del avión nos avisan de que el retraso es de 1h más. Acepto desayuno para no molestaros, 29B.
— MonoMonísimo™ (@IsaacV13) 3 de agosto de 2017
Un estigma para la marca
Que vayan más asientos vacíos que el año pasado parece ser un indicador de que ha pasado factura los problemas del año pasado. Y es que el ruido mediático fue muy fuerte. Por ejemplo, una de las webs más importantes a la hora de poner reclamaciones, Reclamador.es, publicó a principio de años los datos de su portal y fueron muy claros.
Vueling había representado el 34% de las quejas de sus usuarios en la web, con un total de 10.760 reclamaciones. Aunque sea una de las aerolíneas con precios más ajustados, parece que muchos clientes no han vuelto a repetir este verano.
