La nuclear no compra la ‘Tasa Enresa light’ de Ribera y volverá a presentar alegaciones

Ignacio Araluce, presidente de Foro Nuclear, ha anunciado en declaraciones a MERCA2 que la subida ‘light’ de la ‘Tasa Enresa’, el impuesto a las nucleares por la gestión de los residuos radiactivos, está lejos de apaciguar al sector y que siguen negándose a cualquier subida del gravamen. Araluce ha confirmado a este medio que Foro se dispone a presentar una segunda batería de alegaciones contra la disposición, después de que el Gobierno «no hiciera ningún caso» a la primera.

La vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha revelado que este tributo, conocido como ‘Tasa Enresa’, será disminuido de los 1.240 millones extra previstos a 933 millones con lo que el gravamen pasa de 11,14 euros por megavatio hora (MW/h) iniciales a los 10,36 euros MW/h a partir de julio de 2024. En términos porcentuales, esto significa que la subida del 40% se quedará en un 30%. El Ministerio de Transición Ecológica ya ha sometido la nueva propuesta al trámite de información pública.

La postura al respecto de Foro Nuclear, la patronal que representa a las empresas titulares de las centrales nucleares españolas, es resumida de forma cortante por su presidente: «Ni hablar». Araluce explica que el sector «niega la mayor» ante el incremento del gravamen, sea del 40%, del 30% o cualquier otro, recordando que «en 2019 tuvimos una subida del 20%, y las plantas de energía atómica tienen que hacer frente a una fiscalidad que ya es altísima».

LA NUCLEAR SE NIEGA A PAGAR «LA FALTA DE CONSENSO SOCIAL»

«En un principio, sacaron la propuesta del 40% y nosotros hicimos alegaciones; luego, paralizaron el procedimiento porque no lo habían sacado a consulta pública» -recapitula Araluce- «En la nueva propuesta hacen un ajuste porque han visto que ya hemos puesto en el fondo de Enresa 8.000 millones, y también por el ajuste del IPC».

La Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa) es la compañía de titularidad pública encargada de gestionar la ‘basura nuclear’ producida por las centrales de fisión que aún operan en nuestro país. Esta entidad sufraga su actividad con los ingresos de la mencionada tasa, cobrada a los operadores de las plantas atómicas.

Uno de los motivos del encarecimiento de la Tasa Enresa es el cambio de modelo en la gestión de los residuos nucleares, que descarta el almacén centralizado previsto en un principio en favor de siete almacenes temporales y un almacenamiento geológico profundo

Uno de los motivos del encarecimiento de la tasa ha sido el cambio de modelo en la gestión de los residuos. En un principio, iba a instalarse un Almacén Temporal Centralizado (ATC) en la localidad de Villar de Cañas (Cuenca). Sin embargo, el pasado 27 de diciembre, el Consejo de Ministros aprobó el séptimo Plan General de Residuos Radiactivos (PGRR), que descarta el ATC contemplado previamente en favor de siete almacenes temporales descentralizados en cada instalación atómica y un almacenamiento geológico profundo. Este ‘golpe de timón’ ha provocado el enfado del Ayuntamiento del municipio, que se está planteando acudir al Tribunal Supremo, además de un fuerte coste económico.

El presidente de Foro Nuclear estima que las indecisiones y los continuos cambios de rumbo en el sistema de gestión de la basura atómica están en la raíz del incremento del gravamen de Enresa, contra el que el sector se ha puesto en pie de guerra.

Ignacio Araluce, presidente del Foro Nuclear
Ignacio Araluce, presidente del Foro Nuclear

«Lo que pasa es que Enresa espera costes mucho mayores porque han cambiado el plan de gestión de residuos; y el Gobierno no ha conseguido un consenso social e institucional para esos cambios» -opina- «Quieren que lo paguemos nosotros, a lo que nos negamos en redondo.

«Ni subida del 40%, ni del 30% ni nada, queremos que se mantengan las condiciones del año 2019» -concluye Araluce- «Antes de finales de abril presentaremos nuevas alegaciones, porque no han sido atendidas ninguna de nuestras reivindicaciones».

En paralelo a las primeras alegaciones contra la Tasa Enresa, Foro Nuclear también presentó sendos recursos contenciosos-administrativos contra el PGRR y contra el abandono del ATC.

La patronal nuclear ya manifestó a principios de enero que el nuevo Plan de Residuos suponía un coste muy superior al previsto inicialmente, debido a las nuevas soluciones adoptadas y falta de consenso entre las diferentes instituciones involucradas. En ningún caso, sostiene Araluce, estos sobrecostes deberían imputarse a las centrales nucleares españolas, que aportan anualmente al Fondo Enresa una cantidad cercana a los 450 millones de euros.