‘Amar es para siempre’ continúa dándonos sorpresas y poniendo al límite a sus personajes más queridos. Últimamente ha sido Lola quien más ha sufrido, especialmente tras salir a la luz su verdadera identidad. Este descubrimiento le ha costado perder su trabajo, a Román y, lo que es mucho peor, a su hija Malena.
Sin embargo, a veces el tiempo y el destino ayuda a poner las cosas en su lugar. Es lo que quizá ocurra en el próximo capítulo de ‘Amar es para siempre’, en el que un accidente pondrá a Malena en riesgo, obligando a Román y a Lola a protagonizar un acercamiento.
3Este martes en ‘Amar es para siempre’: Lola acude al hospital a visitar a su hija
El capítulo de esta tarde de ‘Amar es para siempre‘ estará centrado en el accidente de Malena. Tras recibir la noticia, Román llamará a Claudia para explicarle lo sucedido y pedirle que se encargue del taller, pues los Quevedo al completo deben acudir al hospital. Mientras, la joven permanece inconsciente y Curro se ha dado a la fuga.
Para sobrellevar la situación, Elena buscará apoyo en Julio Crespo, asegurándole que necesita sentirse querida en esos momentos. Por su parte, Victoria se desahogará con Alicia, a la que también explicará que tras lo ocurrido con Malena no sabe si seguir adelante con su negocio juntas o permanecer con su familia.
En paralelo, Trini le confesará a Sofía e Isidro cómo conoció a Iván y cómo fue reclutada por él. Pero a pesar de prometerles su ayuda con el caso, acabará por desaparecer; de hecho, el policía descubrirá que fue vista con una maleta. Respecto a Silvia, Quintero decidirá animarla a vivir con él, y aunque al principio ella se mostrará reticente, finalmente aceptará y tendrán un inicio de convivencia inmejorable.
Por otro lado Basilio decidirá dejar en paz a su hijo Carlos y a Gala, y se despedirá de ellos deseándoles suerte. Al mismo tiempo, Peñalara le confesará a Sebas que echa de menos a Benigna, quien está en Texas conociendo a su nieto recién nacido.
Finalmente, Lola se enterará del accidente de Malena y correrá hacia el hospital sin pensar en nada más que su hija. Allí la sorprenderá Román, que la convence de que se marche a cambio de mantenerla informada sobre su evolución; además, le promete hacer lo que esté en su mano para que madre e hija puedan volver a verse. Lola, agradecida, no dudará en abrazar al contable.








