Vidrala publica sus resultados trimestrales mañana miércoles. Se estima que podrían resultar positivos, pero que recogerían una desaceleración en el crecimiento de las ventas.
En estos momentos, según las pantallas de Bloomberg, hay 18 analistas que siguen el valor de los que el 56,3% tienen una recomendación de comprar, el 37,5% de mantener y el 6,3% de vender, lo que supone un precio objetivo a doce meses de 101,56 euros, un potencial del 34% desde los precios actuales (75,5 euros).
Según Íñigo Recio Pascual, de GVC Gaesco, “esperamos un trimestre marcado por la ralentización de la demanda, influida también por el proceso de reducción de inventarios en el sector, aunque pensamos que se puede compensar, en parte, por unos precios, en general, todavía muy altos”.
En su opinión, Vidrala cumplirá las guías para 2023, que son: crecimiento sostenido de los ingresos de dos dígitos, a pesar de una progresiva menor contribución por una cada vez mayor base comparable; margen Ebitda consolidado en niveles superiores al 25%; los beneficios de 2023 superarán los 7 euros por acción; y la deuda neta será inferior a 0,8 veces ND/Ebitda y un FCF superior a 150 millones de euros.
Además, añade: “no descartamos que la compra de Vidroporto se cierre en este año, lo que sería un paso importante en la expansión de Vidrala hacia mercados de mayor crecimiento”.
Su conclusión es que la empresa que dirige Gorka Schmitt Zalbide logrará unos resultados algo inferiores a los de los trimestres precedentes. “Aunque seguimos estimando que la compañía alcanzará las guías”.
“En general, pensamos que la industria devolverá a los clientes parte de la subida de precios por una relajación de los costes, no sólo los energéticos. Para 2024 estimamos una demanda estabilizada, con volúmenes similares a los de 2023 y estimamos que la moderación progresiva en los precios se podría traspasar a 2024, año para el que proyectamos un ajuste de precios del -6%. A pesar de ello, la solidez de la compañía y los proyectos de crecimiento nos permiten seguir siendo positivos con la evolución del valor”, concluye Recio.
RENTA 4 PREVÉ CIFRAS POSITIVAS PARA VIDRALA
Álvaro Arístegui Echevarría es analista de Renta 4. Para él, habrá unos resultados positivos, con un Ebitda de en torno a 100 millones de euros en el trimestre (cifra que tan solo se ha alcanzado en los tres trimestres previos).
“No obstante, sí que esperamos una sensible desaceleración en el crecimiento de las ventas (estimadas del 7,7% frente al 22,1% en la primera mitad de 2023), que además estimamos se mantendrá en los próximos trimestres, con cierta debilidad de la demanda, como ya sucedió en el primer semestre, pero acompañada de un menor crecimiento interanual de los precios, que hace incluso presagiar cierta caída de ventas en el 2024, que esperamos pueda compensarse por el lado de los costes”.
“A pesar de que la compañía afronta un ejercicio 2024 de mayor incertidumbre por la esperada volatilidad en los precios finales, así como en las partidas de costes, prevemos que pueda mantener unos niveles de rentabilidad en niveles notables (margen Ebitda sobre ventas por encima del 25%)”.
Arístegui aclara que de cara a 2024, se prevé que el ajuste de los inventarios por parte de los clientes finales no provoque caídas adicionales de los volúmenes, mientras que la demanda final debería tender a estabilizarse al partir de una base menor. No obstante, queda la duda de la posible distorsión que la entrada de nueva capacidad productiva podría conllevar si se mantienen los planes de inversión de las distintas compañías. En este contexto de mercado, prevemos cierta estabilidad de los volúmenes en 2024.
Por el lado de los precios, la continua relajación de los gastos, principalmente las partidas concernientes a los costes energéticos hacen prever cierta bajada de los precios finales de venta, algo que venimos previendo desde el inicio de 2023, pero que probablemente va a acentuarse de manera importante en 2024. Como consecuencia de la extrema volatilidad en las partidas de costes durante el periodo anterior, tendría sentido estimar que las ventas de Vidrala en 2024 sufrirán cierta reducción, al contrario de lo que veníamos estimando hasta el momento.
“Por este motivo y dadas las positivas perspectivas de desarrollo de la compañía a medio y largo plazo (reforzadas con su entrada en el mercado brasileño), añade, una posición de solidez financiera que le permiten acometer las inversiones requeridas para su desarrollo sin dejar de lado la remuneración al accionista (DFN/Ebitda 2023 estimado de 0,6 veces), y atractiva valoración en bolsa (VE/Ebitda 2024 estimado de 6,6 veces y P/E de 12 veces), reiteramos nuestra recomendación de sobre ponderar con un precio objetivo de 100,9 euros por acción (frente a los 117 euros por acción previos)”.