La farmacéutica danesa Novo Nordisk y la empresa de tecnología Valo Health han anunciado la firma de un acuerdo para descubrir y desarrollar nuevos tratamientos para enfermedades cardiometabólicas. Estos fármacos se basarán en el conjunto de datos humanos de Valo y en la computación potenciada por la inteligencia artificial (IA). La colaboración entre ambas organizaciones aprovechará las capacidades de Opal Computational Platform de Valo, incluido el acceso a datos de pacientes del mundo real, el descubrimiento de moléculas pequeñas basado en IA y la plataforma de modelado de tejidos humanos Biowire, diseñada para acelerar el proceso de descubrimiento y desarrollo.
En fundador y consejero delegado de Valo Health, David Berry, ha explicado a MERCA2, lo que supone este acuerdo para la compañía: «La asociación con Novo Nordisk supone una oportunidad única para seguir desplegando nuestra plataforma de datos orientada al descubrimiento y desarrollo de nuevas terapias cardiometabólicas. Estamos emocionados por haber dado este paso e implementar el espectro completo de nuestra herramienta, que abarca desde la caracterización de la enfermedad hasta el desarrollo clínico. Nuestro objetivo es ofrecer nuevas terapias para beneficiar a los pacientes que viven con algunas de las enfermedades crónicas más prevalentes de nuestro tiempo».
NOVO NORDISK Y VALO HEALTH
Las capacidades preclínicas de Valo permiten la identificación y validación de nuevas dianas farmacéuticas, así como el desarrollo de fármacos candidatos contra estas dianas, y pueden ayudar a predecir la seguridad y eficacia de los compuestos.
Además del descubrimiento y validación de dianas como parte de la colaboración, Novo Nordisk está concediendo licencias para tres programas preclínicos de descubrimiento de fármacos en enfermedades cardiovasculares descubiertos y desarrollados por Valo utilizando la Opal Computational Platform.
Según los términos del acuerdo, Valo recibirá un pago inicial y un posible pago por hitos a corto plazo, por un total de 60 millones de dólares.
Según los términos del acuerdo, Valo recibirá un pago inicial y un posible pago por hitos a corto plazo, por un total de 60 millones de dólares, y tiene derecho a recibir pagos por hitos de hasta 11 programas, por un total de hasta 2.700 millones de dólares, además de financiación de I+D y posibles pagos de cánones. La asociación entre Novo Nordisk y Valo aprovechará las capacidades conjuntas clave en datos humanos y genética, con especial hincapié en las enfermedades cardiometabólicas.
El vicepresidente ejecutivo y director científico de Novo Nordisk, Marcus Schindler, ha destacado que con esta alianza la tecnología basada en IA y aprendizaje automático les va a permitir incorporar su visión de «aprovechar los conjuntos de datos humanos en las primeras etapas del proceso, lo que debería conducir a una mejor comprensión de la biología diana».
La ventaja en este caso, es que Valo aporta un enfoque diferenciado y potente al uso de estas tecnologías en datos humanos reales para generar nuevos conocimientos y traducirlos en posibles terapias en beneficio de los pacientes que sufren enfermedades cardiometabólicas.
Con este acuerdo Novo Nordisk complementa su base tecnológica existente. La colaboración permite una estrecha asociación entre las dos empresas, con actividades que podrían abarcar todo el proceso de descubrimiento de fármacos. De hecho, Novo Nordisk y Valo planean trabajar juntos para obtener nuevos conocimientos a partir de datos genéticos humanos y longitudinales de pacientes con enfermedades cardiovasculares.
LA IA EN EL SECTOR
Esta noticia es positiva, pero parece que el sector farmacéutico aún va algo lento en la adaptación de las nuevas tecnologías. Así se indica en el último informe difundido por Crédito y Caución, en donde se destaca que al menos sí hay indicios de que el uso de la IA esta está cobrando impulso.
Los principales motivos por los que el sector farmacéutico está adoptando con lentitud las tecnologías basadas en la IA se deben a la estricta regulación del sector y la preocupación por los riesgos para la salud que supondría el uso de datos inexactos. En la actualidad su aplicación se circunscribe a la monitorización y la imagen médica.
La IA y el aprendizaje automático permitirán reducir el tiempo que se tarda en comercializar un medicamento.
Los macrodatos y la IA suponen una oportunidad para impulsar la eficiencia de la I+D farmacéutica, a la que el sector destina cerca del 25% de sus ingresos. En la actualidad, llevar un medicamento al mercado puede suponer más de una década de trabajo con tasas de fracaso cercanas al 90% durante el periodo de ensayos clínicos. La IA y el aprendizaje automático no solo permitirán reducir el tiempo que se tarda en comercializar un medicamento y el porcentaje de fracasos sino idear enfoques de tratamiento más adaptados y personalizados.
El problema es que la mayoría de los países imponen restricciones al uso sanitario de la IA. «Las preocupaciones de la Unión Europea se basan en cuestiones de privacidad en el entrenamiento de IA y sesgos en sus decisiones o sugerencias», según el analista del sector farmacéutico para Europa Ruben del Río.
DIFERENCIAS SEGÚN LOS MERCADOS
Las autoridades británicas son más permisivas al desarrollo de la IA mientras las suizas parecen esperar a las decisiones definitivas de la Unión Europea y otras organizaciones internacionales antes de implantar un marco. China, por su parte, eliminó en 2022 las restricciones a la tecnología de diagnóstico asistida por IA, lo que está permitiendo un uso más amplio de esta tecnología fuera del ámbito hospitalario.
China, eliminó en 2022 las restricciones a la tecnología de diagnóstico asistida por IA, lo que está permitiendo un uso más amplio de esta tecnología fuera del ámbito hospitalario.
La tendencia actual, sobre todo en Occidente, son las colaboraciones o asociaciones entre empresas farmacéuticas y compañías especializadas en IA o Big Data, como la de Novo Nordisk y Valo Health. En Europa y Estados Unidos es cada vez más común ver asociaciones entre empresas farmacéuticas tradicionales, empresas sanitarias impulsadas por IA y líderes tecnológicos. Algunas de las principales farmacéuticas están creando ya sus propios equipos internos para crear los sistemas de datos y mantener las máquinas fuera del alcance de la competencia.
La IA ya está creando una competencia nueva y creciente para los actores tradicionales de la industria farmacéutica. Ya existen dispositivos portátiles que controlan numerosos aspectos relacionados con la salud por ejemplo, desde los niveles de glucosa en sangre hasta la frecuencia cardíaca. Gran parte de ellos proceden de fabricantes y vendedores que son nuevos en la industria, incluidos gigantes del comercio minorista y de la tecnología.
En realidad, la IA es solo uno de los ámbitos en los que las empresas no farmacéuticas están entrando en el sector. En este sentido, tenemos que hablar de promotores inmobiliarios que construyen hospitales, los fabricantes de electrodomésticos que producen equipos médicos o algunos de los gigantes de Internet que venden medicamentos, como Amazon Pharmacy. También las empresas de telecomunicaciones ofrecen telemedicina y las instituciones financieras ya poseen seguros de salud y atención sanitaria preventiva. Así que el informe concluye que algunas de estas corporaciones podrán adquirir empresas puramente farmacéuticas o biotecnológicas de tamaño medio.
