Dónde y cuándo te puedes encontrar a los revisores del Metro de Madrid

Lo de encontrarse revisores en el metro es parte de la rutina al usar el servicio de transporte más importante de la ciudad. Es que estos trabajadores, dedicados a la tarea de asegurarse que se paguen los pasajes, precisamente deben tomar por sorpresa a los usuarios que hayan decidido saltarse el torno sin poner ese pequeño ingreso necesario para el buen funcionamiento del mismo. 

Si bien en teoría, como lo revelan desde el propio Metro de Madrid los revisores hacen rutas aleatorias cada mes de forma que se acaba cubriendo toda la red, sí que hay un par de patrones fáciles de captar. Por ejemplo es normal verlos en horas pico, a principio de mes, justo cuando se vencen los abonos, y en especial en estaciones con mucha afluencia donde se conectan varias líneas. Sin embargo, como se debe cubrir toda la red, sí que hay una pequeña posibilidad de toparse con ellos al entrar o salir de cualquier estación.

Es decir: Aunque en teoría es posible encontrarse con un revisor en cualquier punto de la ruta en cualquier mes la experiencia de los usuarios marca que suelen estar en sitios como Diego de León, Príncipe de Vergara y otras estaciones grandes, donde además se suma la conexión entre varias estaciones. 

Vale decir que sus revisiones no se limitan al servicio principal. Se pueden conseguir revisores en autobuses interurbanos y, con un cuidado especial en los vagones del metro ligero, que al no tener torno que evite la entrada de un pasajero sin pasaje dependen de los propios revisores para evitar que entren ciudadanos colados en el vehículo. Por su lado la EMT suele tener a los conductores para que estén atentos a esta labor.

En el fondo los revisores funcionan un poco como los glóbulos blancos del sistema de metro. Es que su presencia es importante para evitar que se pierdan los ingresos necesarios para el mantenimiento del servicio, es que aunque el Metro no es una empresa que busque generar ganancias sí que necesita cubrir costos de mantenimiento y sueldos, y este ingreso forma parte del presupuesto para cubrir estos gastos. 

Además, es que pocas veces el metro había sido tan clave para los ciudadanos. Tanto el metro como los autobuses están incluidos en el descuento del abono de transporte que tiene un subsidio especial, que se mantiene gracias a los esfuerzos combinados de la Comunidad de Madrid y el Gobierno. Por tanto, que el servicio reciba el pago de los usuarios es quizás más importante que nunca. 

UNA MULTA CONSIDERABLEMENTE MÁS COSTOSA QUE EL PASAJE

Vale señalar que el castigo por no pagar el pasaje pueden ser bastante más dolorosa que el mismo. Dado que un pasaje de metro sin límite de estaciones cuesta un máximo de 3 euros, y que el abono mensual con el subsidio actual apenas llega a los 21 euros con 30 centimos parece un poco tonto tomar el riesgo de una multa de 80 euros, aun si la misma puede bajar a 40 si se resuelve en menos de 15 días. Es un cálculo bastante simple, que podemos pagar hasta 26 veces el valor de un pasaje corto para ahorrarnos el mismo, no parece ser tan lógico.

En cualquier caso aun sin el subsidio la multa sigue siendo, más cara que cualquier abono mensual, por lo que aun cuando se termine el descuento necesario para afrontar la crisis igual no será especialmente lógico saltar el torno. Al mismo tiempo dado que para alguno no se trata de una decisión económica, sino de un acto de rebeldía antisistema, por lo que lo más probable es que seguirá ocurriendo

EL METRO EN UN VERANO COMPLICADO 

Vale decir que en este momento el Metro de Madrid enfrenta una pequeña crisis comunicacional debido a su manejo de la más reciente tanda de mantenimiento que se está haciendo en la línea 1, y que ha dejado la misma cerrada en el trozo entre Caldecarros y Sol. La medida, necesaria para las labores, ha sido señalada incluso como clasista al cerrar una parte de la principal línea de la ciudad justamente en donde económicamente es más necesaria. 

Esto puede envalentonar a esos usuarios que saltan el torno por temas de rebeldía. Además, que dado que hay menos estaciones donde hacer acto de presencia, será más probable que se consigan alguno de estos usuarios. 

De todos modos dado que el metro es un servicio usado en el día a día es importante que como usuario seamos responsables con el servicio. La pequeña cuota que se paga para poder usar el servicio es importante para que funcione, y en Madrid el Metro debe funcionar para que funcione la ciudad.

Ernesto Rodriguez
Ernesto Rodriguez
Periodista, entrevistador e investigador de oficio. Amante del cine, la música y Political Junkie. Escribo de empresas de transporte, cultura y sanidad