Digi mantiene su estrategia de conseguir clientes en España. Su negocio consiste en jugar con los márgenes para mantener su competitividad en los precios, un modelo importado de otras compañías, como Uber, con el fin de captar usuarios y poder después amoldar los precios. Este modelo tiene serias consecuencias, al asumir mayores gastos. En concreto, la operadora rumana ha hundido sus ganancias globales en un 97% entre enero y marzo, hasta los 10,8 millones de euros, frente a los 334,5 millones.
La operadora rumana ha incrementado la facturación en un 11,7%, hasta los 394,9 millones de euros, respecto al mismo periodo del año pasado, pero ha disparado sus gastos operativos. De esta forma, la operadora ha disparado sus ventas en España en un 29,4%, hasta los 143,4 millones de euros, frente a los 110,8 millones del mismo periodo del año anterior. Los ingresos aumentaron en Rumanía en un 3,7%, frente al 3% de Italia, su tercer gran mercado europeo.
No obstante, al mismo tiempo ha disparado los gastos operativos en un 25,1%, hasta los 116,3 millones, frente a los 92,9 millones registrados en el primer trimestre del año anterior. En cuanto a los ingresos, Digi obtiene de España el 36,3% de sus ingresos, mientras Rumanía aporta el 62,1% en este primer trimestre del año.
DIGI DISPARA SUS GASTOS OPERATIVOS
En este sentido, el peso de España en el negocio de Digi aumenta en cinco puntos respecto al mismo trimestre del año anterior, al pasar del 31% a ese 36,3%. Así las cosas, España supone para Digi el 32% de los gastos operativos, que se han incrementado con fuerza en el global de la compañía por las depreciaciones de activos, cuyo montante ha ascendido hasta los 100,7 millones. En total, Digi soporta un gasto operativo de 365,5 millones. La operadora, además, ha tenido un impacto de 20,4 millones por la normativa contable NIIF 16, mientras el ebitda ajustado excluyendo esta regla ha alcanzado los 113,4 millones, un 7,38% más.
el incremento de los ingresos generados en España se debió al aumento de la contratación de las telecomunicaciones móviles
Según ha explicado la compañía, el incremento de los ingresos generados en España se debió al aumento de la contratación de las telecomunicaciones móviles, con un mayor impulso de los servicios e Internet fijo. En este sentido, ha señalado que los servicios han pasado de los 3,21 a 4,049 millones, un 26,1% más.
Por su parte, el resultado bruto de explotación (Ebitda) de Digi se ha elevado hasta los 133,5 millones de euros, un incremento del 7,4% más que en el año anterior, en línea con la inflación, mientras, el resultado operativo se ha desplomado en un 17%, hasta los 32,8 millones de euros.
En cuanto al Internet fijo, el número de clientes se ha disparado en un 69,2%, hasta los 973.000 a cierre de marzo, mientras que los de telefonía fija han pasado a 320.000, un 63,3% más.
DIGI REGISTRA 5,3 MILLONES DE CLIENTES
Con todo, la compañía ha registrado un total de 5,3 millones de usuarios, unos 424.000 más, un aumento del 34% y un récord para el llamado cuarto operador, una vez que Bruselas dé el visto bueno a la fusión de MásMóvil con Orange. La compañía se anota así un incremento de más de 1,3 millones de clientes respecto al mismo periodo del año anterior.
En Rumanía, los ingresos alcanzaron los 244,8 millones de euros en comparación con los 236,1 millones entre enero y marzo del pasado año. Se trata de un aumento de apenas el 3,7% en su principal mercado. Los servicios de telecomunicaciones, fijos, Internet y televisión de pago.
La operadora ha asegurado que ha rebajado las tarifas móviles, así como en la mezcla de paquetes de suscripción, motivo por el que suben los contratos. En este sentido, los clientes han aumentado en un 6,2%, hasta los 5,507, en la televisión de pago, mientras Internet fijo ha registrado un aumento del 11,2%, hasta los 4,309 millones; mientras que los servicios de telecomunicaciones se han disparado un 19,1%, hasta los 5,178 millones.
La compañía afirma que todo ello se ha logrado por unos «precios competitivos», a costa de disparar los gastos operativos. Eso sí, los clientes de telefonía fija se hunden un 4,9%, hasta los 922.000.
