Miguel Zorita, a través de Nox, ha pedido permiso al Gobierno para dar entrada en Abengoa a los inversores financieros estadounidenses, encontrados por Terramar, tal y como marca la ley. Esta autorización es clave para Zorita y sus socios si consigue hacerse con el concurso de acreedores de la compañía sevillana. Según ha podido conocer MERCA2, los trámites se iniciaron hace una semana, al considerarse como una de las más que posibles ofertas ganadoras.
La alianza de Nox y Terramar ha mostrado sus credenciales para obtener la victoria, aunque admite que la posibilidad de Cox Energy, la otra pujante con más posibilidades de hacerse con Abengoa, es también viable. Ante esta hipótesis, Zorita ha movido ficha ya que podría obtener el concurso sin que haya recibido el visto bueno del Ejecutivo de Pedro Sánchez y su oferta podría caer inmediatamente después. Sería similar a cruzar el desierto para morir a los pies del pozo de agua.
Terramar ha encontrado la financiación para Zorita, pero son socios financieros de EE UU
Por un lado y cabe recordar, es el juez Jesús Ginés Gabaldón quien decide al ganador. El instructor del Juzgado 3 de lo Mercantil de Sevilla está tardando en dar la solución a esta subasta por Abengoa, pero tampoco tiene límite de plazo para sentenciar la adjudicación. El fallo se esperaba antes de Semana Santa, pero se demora ante las dudas y análisis ofrecidos por las pujadoras y la banca acreedora, a la que se le está consultando su visión al respecto.
EL GOBIERNO TENDRÁ LA ÚLTIMA PALABRA EN LA OFERTA DE TERRAMAR EN ABENGOA
Por otro lado, si Terramar consigue el beneplácito del Gobierno, la lucha por Abengoa pondría las espadas en lo alto en plena decisión. Desde el Ministerio de Industria se muestran muy reacios a que Abengoa se convierta en una empresa extranjera, más cuando es considerada estratégica y tras el monumental chantaje a Ferrovial para evitar lo inevitable, su marcha a Países Bajos.
El principal obstáculo de Zorita y Terramar, un fondo dedicado a la reestructuración y troceamiento de empresas para venderlas después al mejor postor, es la conocida como ‘ley antiopas’, que prohíbe a las empresas extranjeras invertir más del 10% en compañías españolas consideradas estratégicas. A finales del pasado año, el Gobierno prorrogó este blindaje otros dos años más, hasta diciembre de 2024, mediante un real decreto-ley de medidas para contener las consecuencias de la invasión de Rusia a Ucrania.
En 2020, el argumento se produjo por las consecuencias económicas en plena pandemia y las fuertes caídas en Bolsa, que dejaron a numerosas firmas del Mercado Continuo a tiro de una posible opa. De esta forma, es el Ejecutivo quien tiene la última palabra para autorizar esta entrada de inversión extranjera en Abengoa, si este capital alcanza o supera el 10% del capital. En el caso de las no cotizadas, el montante superaría los 500 millones de euros, como sería el caso de Abengoa.
TERRAMAR SÓLO HA ENCONTRADO INVERSORES FINANCIEROS PARA ABENGOA
La petición la han realizado los socios españoles de esta puja, según han apuntado las fuentes conocedoras de la operación. De esta forma, la entrada de Terramar, así como inversores extranjeros que le acompañen, estaría pendiente del Ejecutivo.
La banca acreedora está estudiando únicamente dos posibles ofertas en esta recta final. «Tienen prácticamente descartadas las de Urbas y RCP-Sinclair», apuntan las mismas fuentes. Todo quedaría así entre Nox y Terramar, por un lado; y entre Cox Energy, por el otro. Este escenario ha activado a Zorita a la hora de eliminar obstáculos que impidan la adjudicación o retrasar la puesta en marcha de su plan de reestructuración de Abengoa.
Nox, que lidera la puja con Terramar, tiene que hacer este trámite para cumplir con la norma vigente. «Esta burocracia no se suele demorar», han considerado las fuentes consultadas por este medio, pero para cubrirse las espaldas lo inician por si acaso se concede su pretensión de hacerse con la compañía que fuera líder en energía renovable. En caso contrario, Nox tendría un problema para poner en marcha Abengoa.
LA OFERTA DE ZORITA, CON SERIAS POSIBILIDADES
El hecho de dar este paso, no obstante, supone que Zorita tiene numerosas papeletas para ganar este concurso. «Hay serias posibilidades», sostienen las fuentes consultadas. Terramar, por su parte, se ha hecho con un grupo nutrido de inversores, en su mayoría financieros. «No son industriales y están habituados a este tipo de inversiones», pero la mayoría proviene de EE UU.
Cox Energy, por su parte, ha aportado 5,5 millones al Juzgado como una nueva forma de demostrar que su plan va en serio. Al contrario que Nox y Terramar, se trata de una apuesta puramente industrial, con pagos a los actuales bonistas de Abengoa y posterior negociación de los avales y líneas de crédito. La compañía dirigida por Enrique Rimelque es la única que mantiene los puestos de trabajo para los 9.500 trabajadores durante los próximos tres años. En este sentido, tal y como publicó en exclusiva este medio, alcanzó un acuerdo con TSK para desarrollar proyectos por valor de 4.000 millones de euros.
Por su parte, la apuesta de RCP-Sinclair y Urbas apenas cuentan con el respaldo de la banca acreedora. De hecho, el último escrito de Urbas ni siquiera fue admitido a trámite. Todo queda ahora en manos del juez, pero ahora el Gobierno podría vetar directamente la entrada de capital extranjero en Abengoa.
COX ENERGY GANA ENTEROS EN ABENGOA POR LA ESPAÑOLIDAD DE ABENGOA
Cabe señalar que el anterior equipo de Industria, dirigido por Reyes Maroto, candidata del PSOE al Ayuntamiento de Madrid, y Juan Ignacio Díaz, como jefe de Gabinete, preferían a Urbas en esta liza. No obstante, en el Gobierno no se opta por una u otra opción, sino por la españolidad de la compañía, y en este punto, Cox Energy gana enteros.
Ultramar, la supuesta quinta en liza, se cayó del concurso de acreedores tras dejar de abonar al procurador y no realizar mejora alguna de su oferta final, unos documentos que fueron prácticamente una copia de otros, según señalaron las fuentes consultadas.
Por el momento, ninguna de las ofertas pasó el último corte y es ahora cuando el administrador concursal y el juez estudian la mejor de las opciones para apoyar la viabilidad de Abengoa. En este concurso de acreedores se encuentra el 70% de los activos de la compañía sevillana, la totalidad de la plantilla y una treintena de empresas. Es la parte productiva de una compañía que llegó a liderar el mercado de la energía renovable en España.
LOS CONDICIONALES ABUNDAN EN LA OFERTA DE URBAS
El juez está estudiando cada una de las mejoras antes de decantarse por cada uno de los proyectos. Las ofertas contienen su propia literatura, desde quienes hablan de proyectos potenciales a quienes aseguran trabajo para la compañía de cara a los próximos años y mantener la plantilla. Otras empresas han encargado a asesores y fondos expertos a buscar inversores, pero sin cerrar acuerdo de calado alguno.