Seguro que nunca habías imaginado que fuese posible secar una prenda de ropa en el congelador. Por extraño que parezca sí que se puede, de hecho es una técnica que utilizan los exploradores en sus expediciones a regiones polares. Aunque su principal uso es mantener los alimentos conservados durante mucho tiempo, el congelador puede ofrecer funciones tan desconocidas como sorprendentes y prácticas a las que podemos recurrir en momentos puntuales. Además de secar la ropa podemos limpiar prendas vaqueras sin agua, estirar esos zapatos que nos quedan apretados o devolverle la elasticidad a esas medias dadas de sí.
1UN TRUCO DE EMERGENCIA
Durante el invierno hacer la colada puede ser muy fastidioso, sobre todo en épocas de borrasca, cuando el tiempo está muy nublado o, aún peor, cuando no deja de llover. El truco del congelador sirve para esa prenda que está tardando demasiado en secar y que necesitamos tener cuanto antes. Solamente hay que introducirla en el congelador durante un par de horas y saldrá perfectamente seca y sin arrugas. También muy fría, claro está, así que un planchado rápido no va mal para calentar un poco la tela y poder ponernos la prenda sin enfriarnos.