La fruta que debes tomar para que hígado esté en perfecto estado

El kiwi, también conocido como la grosella china, es una fruta popular que está cubierta de una piel característicamente peluda. Probablemente reconozca el kiwi como la sabrosa fruta de pulpa verde vibrante, centro blanco y semillas negras que a menudo se cuela en las ensaladas de verano. Pero, ¿sabía que el kiwi es una fruta que favorece la salud y que incluso puede contribuir a revertir la enfermedad del hígado graso? A continuación, hemos recopilado los principales beneficios del kiwi, y por qué debería comer también la piel del kiwi.

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Fuente saludable de energía

El kiwi contiene azúcares que el cuerpo convierte en glucosa para alimentar los procesos celulares. Además, el azúcar contenido en frutas como el kiwi no contribuye a la enfermedad del hígado graso. Esto se debe a que el azúcar de la fruta está emparejado con la fibra que retrasa la liberación de azúcar en el torrente sanguíneo.

Como resultado, el hígado puede transformar eficazmente el azúcar en energía, sin tener que almacenar el exceso de azúcares en forma de grasa. A su vez, los kiwis le proporcionan una fuente de energía sostenida que puede alimentar el cerebro, los músculos y casi todas las demás células del cuerpo sin que se produzca una caída de energía posterior.

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