Se acercan las fechas navideñas y uno de los alimentos más usuales en las mesas es el marisco. Esto, gracias a su sabor, ya que es todo un manjar, pero para ello es necesario que tenga cierta calidad y esté bien cocinado. Cigalas, langostinos, gambas o carabineros están ya al alcance de todos los bolsillos y son parte obligada de los festines gastronómicos. Algo que a simple vista parece tan sencillo, cuando se trata de marisco tiene sus peculiaridades, al menos si queremos que resulte exquisito. Si ya estás pensando en el menú de Navidad, vamos a aprovechar para darte algunas recomendaciones sobre su cocción.
7Preparada una fuente de agua fría

Una vez que el marisco está cocido, es muy recomendable tener preparada una fuente de agua fría con cubitos de hielo, donde por unos minutos lo introducimos hasta que se enfríe. Esto repercute sobre todo en que cortamos de golpe la cocción, no dejando que se pase. Además, en el caso de las gambas y los langostinos, sobre todo, nos resulte más fácil de pelar. Si se trata de camarones o percebes, como excepción, en lugar de hielo, los cubriremos con un paño de cocina limpio para que conserven la temperatura.