Con atún, a la carbonara o ensalada: recetas de macarrones para todos los gustos

Espaguetis, tiburones, macarrones… Sin duda, nos encanta la pasta, ya que está deliciosa, es nutritiva y es muy económica. Además, es uno de los platos más versátiles que existen, ya que permiten preparar todo tipo de recetas sin tener mucha idea de cocinar. Sin gastar mucho y sin casi saber freír un huevo, harás recetas magníficas para quedar como un chef con tus amigos y comer hasta reventar.

De hecho, vamos a demostrarlo con hechos. Lo haremos con estas recetas de macarrones para chuparse los dedos y disfrutar de la pasta. Todas ellas son bastante sencillas y tienen un gran sabor. Si sabes cosas básicas de cocina, como sofreír, triturar ingredientes o cocer pasta, no vas a tener ningún problema para cocinar.

[nextpage title= «1»]

2
A la carbonara

Los espaguetis a la carbonara son muy conocidos, pero también se pueden hacer con macarrones. Vamos a hacer nuestra propia versión, con nata líquida, huevo y otros añadidos. Vamos a necesitar 100 gramos de nata líquida por cada 100 gramos de pasta, junto a 25 gramos de beicon y una yema de huevo.

Siguiendo con otras proporciones de macarrones, por cada 200 gramos de pasta, necesitamos media cebolla mediana, media cucharada sopera de mantequilla y 150 gramos de queso parmesano. De nuevo, adapta las proporciones a tu gusto, echando más o menos según la cantidad de pasta que quieras hacer. Por ejemplo, si vas a hacer 400 gramos, echa una cebolla mediana, 400 gramos de nata líquida, 100 gramos de beicon, 4 yemas de huevo, una cucharada de mantequilla y 300 gramos de queso parmesano.

Para hacer la salsa, picamos cebolla y la pelamos, dorándola con la una cucharada de mantequilla. La panceta la cortamos en tiras y los ajos los machacamos, echando ambos en la sarten junto a la cebolla para sofreír. Ahora es tiempo de cocer la pasta, mezclando las yemas de huevo con queso aparte mientras se van haciendo.

El siguiente paso, es añadir la nata líquida a los espaguetis cocidos, dejando la mezcla a fuego lento durante unos 5 minutos. Mientras tanto, apagamos el fuego del sofrito, añadimos la mezcla de yema y queso al sofrito, removiendo rápidamente. Cuando esté mezclado, lo añadimos a la pasta hervida con nata líquida. Ahora ya solo es cuestión de servir y disfrutar de esta deliciosa receta.

[nextpage title= «3»]