El Reino Unido está realizando un proyecto piloto desde hace tres meses para testar si sería posible y beneficioso implementar la jornada laboral de cuatro días, y por el momento los resultados son realmente satisfactorios.
El proyecto implementado por la plataforma digital ‘4 Day Week, Global’, que tendrá medio año de duración, se está llevando a cabo en 70 empresas e involucra a 3.300 trabajadores, y tanto las empresas participantes como sus trabajadores parecen encantados con los resultados.
El 88% de las compañías califican la prueba de forma satisfactoria para su negocio y los datos recogidos indican que en el 95% de las empresas participantes la productividad no se ha visto reducida. La inmensa mayoría considera viable mantener esa jornada laboral sin reducir los sueldos de los empleados.
En España, la Comunidad Valenciana, presidida por Ximo Puig, hizo oficial a finales de agosto su propuesta para que empresas, de manera voluntaria, prueben con este calendario que implica una jornada laboral de 32 horas. A cambio, cada empresa recibirá una ayuda de 9.611 euros, repartidos en tres años de forma decreciente.
Este proyecto busca comprobar cómo afecta a la rentabilidad, la productividad y la conciliación, trabajar cuatro días a la semana, en vez de los cinco habituales en la actualidad.