Hay infinitas posibilidades a la hora de cocinar con cerdo. Pero si hubiese que quedarse con una de las partes más sabrosas de este animal, esa sería sin duda la que representa el secreto ibérico. De hecho, su nombre no es fruto de la casualidad, ni mucho menos. Más allá de su se trate de una parte “oculta” de la anatomía del cerdo, durante mucho tiempo fue algo limitado a unos pocos privilegiados.
Lo más habitual es prepararlo a la plancha, pero, como veremos a continuación, también puede hacerse al horno y que quede genial. Solo hace falta tener en cuenta algunas cosas.
7El mejor acompañamiento para un secreto ibérico

Aunque nosotros nos hayamos decantado por unas patatas para acompañar a un buen secreto ibérico, lo cierto es que hay bastantes alternativas más. Con una ensalada de lechuga y tomate, también quedará genial (y engordará menos, todo sea dicho de paso).
Y si no, otra opción igualmente recomendable es utilizar como guarnición un poco de arroz blanco. No necesita nada más, porque congeniará perfectamente con el sabor y la grasa de la carne.