Hay que ver lo rica que está la tortilla de patatas. Tanto que es, junto a las croquetas y a la ensaladilla rusa, uno de los platos más demandados dentro del recetario más clásico de nuestro país. Piensa que la inmensa mayoría de bares y restaurantes la ofrecen en sus cartas y menús. Además, también la puedes preparar tú mismo. Aunque si lo que quieres hacer es dejarla jugosa, no la puedes hacer de cualquiera manera. Precisamente de eso es de lo que vamos a hablarte a lo largo de este artículo: de lo único que tienes que hacer para que te quede bien jugosa.
Las propiedades de la patata
Antes de pasar a contarte cómo se prepara esta receta de tortilla de patatas y cuál es el truco que tienes que hacer para que te quede bien jugosa, creemos que es el momento de poner en valor a la patata. Es decir, a la otra protagonista de este plato junto con los huevos. Y ya no solo porque estén muy ricas o porque sean un ingrediente muy versátil. Queremos hacerlo por la gran cantidad de propiedades que tienen. Así, por ejemplo, piensa que al tener tantos hidratos de carbono son una gran fuente de energía. Pero además, contienen mucho potasio, por lo que son muy buenas para los músculos. También tienen mucha vitamina C y vitamina B.
