Cómo si el hecho de hacer una dieta para bajar de peso o mejorar el estado de salud no fuera lo suficientemente difícil, también existe el efecto rebote. Esto se refiere a cuando logramos concretar a algunos de los cometidos propuestos, pero cuando los conseguimos comenzamos a relajarnos. Esto puede significar que se pierda una gran parte de los objetivos cumplidos y se comience a recuperar peso hasta que vuelves a tu estado anterior.
Si alguna vez has atravesado esto, sabes de lo que estamos hablando. Por este motivo, en el día de hoy les brindaremos una serie de consejos para evitar que esto vuelva a suceder.
1No existe una dieta milagrosa
En el primer lugar de esta lista de consejos es importante no caer en una dieta milagro. No existen soluciones mágicas con las cuales se pueda perder peso rápidamente y con poco sacrificio. Si realmente se desea mejorar el estado de salud general, se deberá, desde un primer momento, realizar un trabajo duro con mucho esfuerzo y dedicación. También es necesario ponerse objetivos alcanzables según sea su peso, edad y lo que se quiera lograr. A continuación les contaremos que otros aspectos se deben considerar para no sufrir una “recaída”.