Cómo saber si vas a tener un infarto según el tamaño de tus tobillos

Las enfermedades circulatorias siguen siendo, incluso durante la pandemia, la primera causa de muerte en España. En el año 2020, se contabilizaron 119.853 fallecimientos por problemas cardiovasculares, es decir, el 24,3% de los decesos totales. Una cifra que supuso un incremento de un 2,8% con respecto al año anterior. Los principales factores de riesgo son los hábitos de vida y la alimentación, además de la predisposición genética. Para evitar sustos, además de revisar nuestro estilo de vida, tenemos que estar pendientes de algunos síntomas que podrían estar indicando que algo malo está pasando en nuestro corazón. EL INFARTO ES UNA CAUSA DE MUERTE MUY FRECUENTE Cuando el corazón tiene que hacer un esfuerzo extra para funcionar, su capacidad para bombear sangre y oxígeno a todas las partes del cuerpo puede verse reducida. Esto provoca un desequilibrio porque las zonas del cuerpo más alejadas, no reciben un riego sanguíneo adecuado, lo que provoca algunas señales muy características, como la hinchazón de las extremidades, sobre todo los tobillos y los pies. Si detectas alguno de los siguientes síntomas, lo mejor es que consultes con tu médico. LOS TOBILLOS HINCHADOS SON SEÑAL DE RIESGO DE INFARTO Cuando el corazón tiene dificultades para bombear la sangre, esta tiende a acumularse en zonas como el abdomen, las piernas y los tobillos. Esto hace que se incremente la presión en los vasos sanguíneos y parte del líquido que circula termina distribuyéndose pro los tejidos de alrededor, donde se queda estancada y acumulada, lo que provoca una hinchazón. Los tobillos, además, soportan el peso del cuerpo, por lo que aún se resienten más. La insuficiencia cardiaca también impide que la sangre irrigue adecuadamente los riñones, lo que dificulta que el proceso de eliminación de desechos a través de la orina. Es decir, se retienen líquidos, y esto también incrementa la hinchazón. PIES HINCHADOS En muchos casos, si los tobillos aparecen hinchados, sucederá los mismos con los pies, por los mismos motivos. A veces puede deberse a un problema de mala circulación, pero también puede ser síntoma de una insuficiencia cardiaca, por eso no hay que dejarlo pasar y lo mejor es consultar con un especialista. En el proceso circulatorio, las venas devuelven la sangre al corazón contendiendo dióxido de carbono, pero si existe una enfermedad cardiaca podrían aparecer problemas de coagulación con riesgos tan graves como la trombosis o el infarto. Otras señales características son los pies pálidos y fríos. MUCHAS VISITAS NOCTURNAS AL BAÑO Levantarse a menudo por la noche para ir al baño también puede indicar sospecha de problemas cardiacos. Al estar el cuero en posición tumbada, el retorno venoso se favorece, así que ese exceso de líquido retenido durante el día en las extremidades, puede llegar más fácilmente a los riñones para ser eliminado por la orina. Este es el motivo por el que las personas con insuficiencia cardiaca se despiertan varias veces durante la noche con ganas de orinar. CANSANCIO ANÓMALO Cuando hay una enfermedad cardiaca el corazón tiene menos fuerza y no puede bombear suficiente sangre hacia los pulmones, los músculos y los demás órganos. Debido a esto, el paciente puede experimentar una constante sensación de fatiga que se incrementa con el mínimo esfuerzo físico. Además, el riego sanguíneo hacia el cerebro también disminuye, provocando síntomas como confusión, mareo o, en los casos más graves, pérdidas de conciencia breves. DIFICULTAD PARA RESPIRAR La insuficiencia cardiaca también provoca que la sangre que quede estancada en los pulmones y esta acumulación de líquido incrementa la presión. Esto provoca dificultad para utilizar el oxígeno que se obtiene al respirar, por lo que la capacidad pulmonar queda muy reducida. En las primeras fases de la enfermedad la sensación de ahogo se siente sobre todo tras algún esfuerzo físico, pero con el tiempo la dificultad se presenta también en reposo, sobre todo en posición horizontal porque esta postura favorece el encharcamiento. Es por esto que muchas personas con enfermedades cardiacas necesitan dormir reclinadas. TOS FRECUENTE La retención de líquido en los pulmones también puede ser responsable de una tos seca cronificada, que a veces mejora en posición erguida. Si toses con frecuencia, sin expectoración y con sensación de ahogo, puede ser un indicativo claro de problema cardiaco. TRATAR LA INSUFICIENCIA PARA EVITAR UN INFARTO La insuficiencia cardiaca tiene que tratarse de forma adecuada en cuanto presenta las primeras señales. De lo contrario, el corazón hará todo lo posible para adaptarse, y el músculo cardiaco se terminará haciendo más grueso para compensar el esfuerzo y poder bombear más sangre en cada latido. Esto que parece positivo, en realidad no lo es, porque el órgano está siendo sobrecargado, y a largo plazo puede empeorarse la insuficiencia y ocasionar accidentes como el infarto.

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