La subida de precios de la luz, los combustibles, los productos básicos, etc. está afectando a todos los consumidores, pero muy especialmente a los autónomos. En los últimos meses los gastos afectos a la actividad se han disparado.
La situación se complica y son muchos los que ya están buscando posibles soluciones que, en muchos casos, pasan por tener que subir el precio de sus productos o servicios. Aunque los profesionales saben que esto no siempre es buena idea, en este caso parece que no hay más remedio.
1Se disparan los gastos para los autónomos
A día de hoy tener un negocio abierto, incluso ejercer una actividad profesional desde casa, tiene un coste mucho más elevado que hace un año. Esto se debe en gran medida al incremento del precio de suministros básicos como la luz.
Y no solo eso, también han subido el coste de las materias primas, los costes laborales, los carburantes y el IPC. El resultado es que ejercer la actividad es ahora mucho menos rentable de lo que lo era antes de que comenzara la crisis del coronavirus.