El IBI es uno de los tipos de impuestos que más quebraderos de cabeza producen en todos los contribuyentes que tiene un bien inmueble bajo su propiedad. Se trata de un tributo de carácter anual y que no admite excepciones. Sin embargo, porque gente sabe que es uno de los impuestos que tiene más margen de ahorro. Tanto es así que la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha publicado recientemente unas recomendaciones para tratar de reducir la cantidad a la que asciende el importe total a pagar. Y precisamente en este artículo vamos a contártelas, así que sigue leyendo si quieres enterarte de todo.
A veces, un error en estos datos puede hacer que tengas que pagar de más
Tal y como te acabamos de contar, es conveniente que antes de que pagues el impuesto del IBI compruebes si los datos que el catastro tiene sobre ti son los adecuados. Esto se debe a que en ocasiones pueden ser erróneos. Y ello puede acarrear que tengas que pagar una cantidad superior a la que te correspondería. Si efectivamente tus datos fuesen erróneos, deberías de iniciar un procedimiento de Corrección ante el catastro lo antes posible.
