Renfe afianza su posición en la alta velocidad en el oeste americano

Renfe sigue consolidándose como principal operadora de alta velocidad en EE.UU. En julio de este año la compañía española fue ratificada por la promotora estadounidense como operadora de la futura red de infraestructura ferroviaria del país. Este movimiento viene tras varios años ofreciendo servicios de asesoramiento y consultoría a la promotora Texas Central Partners.

Igualmente, y para afianzar este proyecto, Renfe se ha adherido a la Asociación de Alta Velocidad de Estados Unidos (USHSR, por sus siglas en inglés). Se trata de la principal asociación dedicada al desarrollo de la alta velocidad en el país.

La compañía se convierte así en miembro de esta asociación integrada por operadores, constructoras, consultoras, fabricantes de material rodante y empresas de servicios, tanto nacionales como internacionales. Asimismo, todas ellas están relacionadas con el sector norteamericano de la alta velocidad.

Además de darse a conocer entre las empresas del sector en Norteamérica, la adhesión a la USHSR presenta diversos beneficios para Renfe, entre los que destacan un mejor acceso a la información sobre la nueva legislación en relación a la alta velocidad en el país, la participación en diversos foros y seminarios de interés o la colaboración en las negociaciones que USHSR mantenga en materia legislativa, financiera o técnica.

Por otro lado, y respecto a la línea de alta velocidad, Renfe operará en toda la evolución del proyecto de la línea de alta velocidad que unirá Dallas y Houston. En diciembre de 2019, la operadora ferroviaria fue elegida para los trabajos previos y operación de la línea, a través de un preacuerdo, pero ahora el contrato se ha firmado.

Según los planes del proyecto, está previsto que las obras estén finalizadas en 2026, con una inversión de entre 12 mil y 15 mil millones de dólares. Renfe estima generar unos ingresos que pueden llegar a los 6.000 millones de dólares, o 5.100 millones de euros hasta el año 2042, año en el que está previsto que venza la concesión para operar la red.

ESTRATEGIA DE INTERNACIONALIZACIÓN

Este plan para operar la primera línea de alta velocidad estadounidense forma parte de la estrategia de internacionalización de Renfe. Una vez consolidada su experiencia en Arabia Saudí, y una vez que la fase comercial está superada, Renfe busca ahora nuevos mercados donde poder expandirse a corto y medio plazo.

A lo largo del pasado 2019, la compañía constituyó la filial Renfe of America, con el director de Desarrollo y Estrategia del grupo, Manel Villalante, al frente. Así, buscan exportar el modelo de Cercanías a EE.UU., donde tiene en el radar el servicio regional de Los Ángeles, San Francisco y Boston.

En Europa, tras su colaboración con el operador público francés SNCF y con Ferrocarriles de Portugal (CP), el grupo sigue explorando oportunidades de participación en futuras licitaciones de servicios domésticos de viajeros en países que forman parte de la Unión Europea que ofrezcan negocios rentables. Sobre todo, Renfe tiene puesta la mirada en Francia, donde estiman que pueden tener oportunidades los próximos años.

Por último, la compañía también está estudiando proyectos de cercanías en países de América Central y del Sur, como son Costa Rica, Guatemala, El Salvador, Nicaragua y Bolivia. Igualmente, en la alta velocidad siguen buscando oportunidades de negocios y proyectos que puedan surgir en América del Norte, y en los estados de Florida, Washington o Illinois en Estados Unidos y Ontario en Canadá.

Jaime O
Jaime O
Redactor de economía y empresas especializado en Construcción, Inmobiliario y Transporte