Renfe ha devuelto un total de 97,5 millones de euros desde la entrada en vigor del primer estado de alarma en marzo del año pasado a todos los clientes que han cancelado cerca de 2,6 millones de billetes, como consecuencia de las continuas restricciones a la movilidad para luchar contra la pandemia.
En el primer confinamiento, la operadora devolvió 38,5 millones de euros y, desde el pasado 3 de octubre, cuando volvieron las restricciones a Madrid y después al resto de ciudades, provincias y comunidades autónomas, otros 59 millones de euros.
Hasta el pasado domingo 9 de mayo, cuando finalizó el último estado de alarma, Renfe mantuvo vigentes las medidas extraordinarias posventa aplicadas para todos los trenes de ámbito nacional, con las que se facilitaba la devolución o cambio de billete, de forma gratuita, a todos los viajeros que no tuvieran su desplazamiento adecuadamente justificado, o los que no desearan viajar en esos momentos.
Esta medida se aplicó a todos los billetes de recorrido de ámbito nacional para servicios AVE, Larga Distancia, Avant o Media Distancia Convencional. Los viajeros podían optar por la devolución del importe íntegro del billete, sin gastos de anulación, o por un nuevo billete para otra fecha sin gastos de cambio.
Asimismo, Renfe amplió sucesivamente, de forma automática, los plazos de validez y viaje para todos los abonos ‘BonoAVE’, ‘Bono Colaborativo’ y ‘BonoAVE Flexible’ en vigor.
Por provincia de origen, el mayor importe de devoluciones corresponde a Madrid, con 36,9 millones de euros y 891.278 billetes devueltos, y Barcelona, con 14,7 millones y 299.927 billetes. Les siguen Sevilla (7,8 millones de euros y 191.098 billetes); Málaga (5,6 millones y 102.960 billetes); Valencia (5,2 millones y 136.277 billetes); Zaragoza (4,2 millones y 122.269 billetes); y Córdoba (3,5 millones y 110.069 billetes).
Renfe recuerda que las medidas que las autoridades sanitarias han establecido para viajar en España durante las diferentes fases de la pandemia, y las propias medidas adoptadas por la compañía antes, durante y después de embarcar a bordo de los trenes, están permitiendo que el transporte ferroviario «se realice cumpliendo las condiciones de seguridad e higiene».
A través del billete personalizado, implantado el pasado 20 de abril, se puede acceder a los datos básicos de la persona que realiza el viaje (datos de contacto como el teléfono móvil y el correo electrónico) y, por tanto, facilitarlos a las autoridades sanitarias que lo solicitan a Renfe cuando una persona ha viajado en tren siendo positivo o haya estado en contacto con otra que lo sea.