Poner en marcha un negocio es una bonita experiencia, pero también implica asumir una serie de gastos que debes poder afrontar. Esto es algo a tener muy en cuenta, porque lo que menos quieres al emprender es empezar tu andadura con un sobreendeudamiento, ya que este puede llegar a convertirse en un auténtico lastre.
Aunque no hayas tenido problema para acceder a la financiación, lo mejor es que controles muy bien los gastos iniciales de tu negocio. Además, cuanto antes aprendas a gestionar bien los recursos económicos, mejor, porque esto te va a venir muy bien de cara al futuro.
Hay partidas de gastos que son inevitables, y otras que puedes obviar o dejar fácilmente para otro momento. Lo bueno es que en prácticamente todas ellas puedes llegar a ahorrar. Por eso, vamos a ver algunos de los costes iniciales más habituales en los negocios y cómo podemos ahorrar en ellos.
Alquiler del local, uno de los principales gastos
El precio medio de alquilar un local comercial depende mucho de la ciudad, incluso de la ubicación dentro de un mismo municipio. Pero, en líneas generales, debes asumir que tener tu propio espacio de trabajo te va a costar una media de 600 euros al mes, y eso sin sumar el coste de los suministros.
Por tanto, debes valorar muy bien la posible rentabilidad de tu idea de negocio, porque vas a empezar tu actividad con unos gastos mensuales fijos bastante altos.
No obstante, puedes buscar otras alternativas. En función de cómo sea tu negocio tal vez te resulte más económico un alquiler de oficina. Es más, si no vas a recibir a clientes, tienes la posibilidad de optar por un coworking, o directamente trabajar desde tu casa.
Servicios de profesionales independientes
Montar tu propio negocio implica realizar una serie de trámites administrativos, no importa si vas a trabajar como autónomo o si prefieres crear una sociedad mercantil. Además, una vez que empieces a trabajar también habrá tareas para las que necesites a especialistas como gestores, asesores legales, etc.
Por suerte, hay muchos profesionales ofreciendo servicios de este tipo, así que no te costará encontrar uno que se amolde lo máximo posible a tu presupuesto. Eso sí, ten en cuenta que en estos casos conviene más primar la calidad del servicio que el precio del mismo. Contar con un buen asesor puede ayudarte a ahorrar.
Tú decides hasta qué punto vas a externalizar las tareas de administración y gestión del negocio. Pero, si quieres ahorrar, mucha veces suele salir más económico contratar todos los servicios con una gestoría (que suele tener abogados, contables, etc.) antes que recurrir a profesionales independientes que solo ofrecen un servicio.
Gastos de aprovisionamiento
Salvo que hayas optado por el dropshipping, en el resto de negocios vas a tener que contar con un stock inicial para poder iniciar tu actividad. Una vez que ya estés en marcha no te resultará muy complicado hacer las labores de aprovisionamiento, puesto que sabrás qué productos tienen más salida y cuáles menos.
Sin embargo, cuando empiezas con tu negocio es muy complicado acertar con el stock. Y esto tiene una gran importancia en tus finanzas, porque si te pasas comprando productos y luego no los vendes, estarás perdiendo dinero.
Para intentar reducir el gasto en aprovisionamiento conviene tomar varias medidas. En primer lugar, asegúrate de que encuentras un proveedor con un buen precio. No tienes que quedarte necesariamente con el primero que encuentres. Además, no olvides poner a trabajar tus dotes de negociación para conseguir el mejor acuerdo posible.
Otro punto a tener en cuenta es que los proveedores elegidos sean capaces de servirte la mercancía en el menor tiempo posible. Así, si te quedas sin unidades de un producto, sabes que puedes reponerlo rápidamente, lo que te ayudará a gestionar mejor el stock.
Una vez elegido el proveedor viene el momento de hacer la compra. En líneas generales, cuanto más volumen compres más vas a ahorrar, pero no te dejes cegar por esta idea. Por muy buen descuento que te ofrezcan al comprar muchas unidades, quizá a ti no te compense hacerlo.
Para dotar a tu negocio del stock inicial debes revisar a fondo tu plan de empresa y, dentro de él, el estudio de mercado. Si tu previsión de ventas está bien hecha te será de gran ayuda para saber cuánto debes comprar. No obstante, en caso de duda, es mejor quedarse un poco corto (siempre puedes comprar más unidades más adelante) que pasarse.
Marketing y publicidad
Los gastos de marketing y publicidad son totalmente necesarios para cualquier nuevo negocio, ya que en caso contrario no se va a dar a conocer. En la mayoría de los casos esto implica combinar el marketing y la publicidad tradicionales con el marketing digital.
La clave está en diseñar una buena estrategia, capaz de ser realmente efectiva. Salvo que seas un experto en la materia, lo mejor es que dejes todo lo relacionado con publicidad en marketing en manos de verdaderos especialistas. Es cierto que esto supone un coste pero, si los profesionales trabajan bien, deberías tener un buen retorno de la inversión.
Una buena forma de ahorrar en esta partida de gastos es no hacerlo todo a la vez. El marketing es algo que vas a tener que hacer siempre de forma constante, no hace falta hacerlo todo de una sola vez. Por ejemplo, puedes empezar creando canales en redes sociales y una web, más adelante puedes invertir en campañas PPC, etc.
Gastos financieros
Son todos esos gastos que se derivan de tu relación con el banco. Los intereses que pagas por el préstamo que has pedido para poner en marcha el negocio, comisiones por tener una cuenta bancaria, por contar con un datáfono, por cobros de recibos, y así un largo etcétera.
Las comisiones han vuelto con fuerza al escenario financiero, pero esto no quiere decir que te tengas que resignar. Haz un buen estudio de las diferentes opciones que hay en el mercado y asegúrate de escoger la entidad bancaria que menos te cobre. Si vas a pedir un préstamo, compara siempre el TAE que te ofrecen diferentes entidades y escoge el más bajo.
Eligiendo bien el banco con el que trabajas te puedes ahorrar unos cuantos cientos de euros cada año, lo que seguro que le viene muy bien a tu negocio.