Adif ha adjudicado un contrato valorado en 5 millones de euros para la redacción de proyectos de adecuación de pasos superiores y emboquilles de túneles de toda la red ferroviaria en los que sea necesario instalar detectores de caída de objetos.
El contrato, que tiene un plazo de ejecución de 36 meses e incluye los trabajos en las líneas de ancho ibérico, estándar y métrico, baraja la instalación de cerramientos de protección para la posterior ubicación del sistema de Detección de Caída de Objetos (DCO), así como la inspección o inventariado de estos elementos de la infraestructura.
Los sistemas de Detección de Caída de Objetos tienen como finalidad evitar las incidencias en la circulación ferroviaria ante la posible invasión del gálibo de la vía por parte de objetos extraños.
Este sistema se considera necesario para mejorar la explotación de las líneas, ya que permite conocer en todo momento y con fiabilidad que la vía se encuentra libre de obstáculos en los puntos en los que se encuentra instalado.
Los puntos más críticos ante la posibilidad de caída de objetos sobre la vía son las bocas de túneles, por la necesidad de controlar los posibles desprendimientos, y los pasos superiores, ante la posibilidad de caída de objetos procedentes del tráfico rodado que circule por los mismos.
El lote 1, que afecta a las líneas de la zona norte, noroeste y noreste, se ha adjudicado a Unión Temporal de Empresas (UTE) integrada por Ines Ingenieros Consultores e Inse Rail, por un importe de 2,54 millones de euros. En cuanto al lote 2, referido a las líneas de la zona sur, este y centro, se ha adjudicado a LRA Infrastructures Consulting, por el mismo importe.