Abertis ha cerrado 2020 con nuevas adquisiciones en Estados Unidos y México, con lo que la compañía española, referente mundial en la gestión de autopistas de peaje, consolida su ambiciosa estrategia de crecimiento internacional. Asimismo, con estos dos movimientos, la empresa demuestra su capacidad para gestionar de forma eficaz su cartera de concesiones, sustituyendo las de próximo vencimiento por nuevos activos con perspectivas de futuro sólidas.
Con la adquisición de Elizabeth River Crossings, en el estado norteamericano de Virginia, Abertis ha formalizado en 2020 su entrada en Estados Unidos. La compañía ya estaba presente en el país a través de su filial de tecnología de peaje electrónico, Emovis, que gestiona varios activos en estados como Rhode Island u Oregón; pero este es el primer gran paso en la gestión de autopistas de peaje. La operación se ha cerrado mediante un consorcio, en el que Abertis tiene un 55%, con el fondo de inversión canadiense Manulife y por un equity total de cerca de 1.000 millones de euros.
Los túneles del Elizabeth River están ubicados en la región de Hampton Roads y son unas de las vías más transitadas del área metropolitana de Virginia Beach-Norfolk-Newport News. Conectan áreas importantes de empleo, comerciales y militares de la ribera del río Elizabeth en Norfolk con el resto del área de Hampton Roads, que alberga el puerto comercial más importante de la Costa Este, y han mostrado una fuerte resiliencia en 2020 durante la pandemia del coronavirus.
La adquisición de este nuevo activo en Virginia es un importante paso más en la estrategia de crecimiento de Abertis en el mercado clave de Estados Unidos, uno de los objetivos de inversión en infraestructuras más importantes del mundo. También representa la segunda gran adquisición de Abertis en menos de un año, tras de la compra, en junio, de la mexicana Red de Carreteras de Occidente (RCO) por cerca de 5.000 millones de euros.
ABERTIS EN MÉXICO
En el caso de México, Abertis y el fondo de Singapur GIC han comprado la participación del 70% en Red de Carreteras de Occidente que estaba en manos de Goldman Sachs, más un 2,3% adicional adquirido a inversores y gestoras de fondos de pensiones mexicanos.
Así, Abertis pasa a controlar el grupo RCO, formado por cinco concesionarias que gestionan ocho autopistas, que en total suman 876 kilómetros. De la misma manera que en EEUU, Abertis refuerza su apuesta por la colaboración público-privada con el objetivo de encontrar soluciones de creación de valor futuro. Algo que ha venido siendo una constante en aquellos territorios en los que opera (España, Francia, Italia, Brasil, Chile, México, Puerto Rico, Argentina e India), y que continuará en Estados Unidos.
La operación supone la entrada del Grupo en el negocio de las autopistas de México y consolida la presencia de Abertis como operador de autopistas en América, donde ya cuenta con una fuerte implantación en Chile, Brasil, Argentina y Puerto Rico.
De cara al futuro, Abertis proseguirá con el análisis de oportunidades que surjan tanto a medio como a largo plazo. La firma española suma casi 9.500 kilómetros de autopistas de gestión directa.
