Es habitual que cuando pensamos en un emprendedor nos venga a la mente alguien que puede dedicarle el 100% de su tiempo a su proyecto. Sin embargo, en muchos casos se afronta el reto teniendo además otra responsabilidad laboral, lo que obliga a hacer “malabarismos” para poder llegar a todo. Por eso, en esta ocasión vamos a ver cómo emprender sin dejar tu trabajo y que esto no se convierta en un problema.
Lo de soñar con ser nuestro propio jefe es algo que a todos se nos ha pasado por la cabeza en alguna ocasión, pero no todo el mundo tiene la valentía y la fuerza de voluntad suficientes para asumir el reto y ponerse manos a la obra, y mucho menos cuando se tiene otro trabajo al que atender. Quienes deciden hacerlo demuestran una fuerza de voluntad férrea que puede conducirles al éxito por el camino más corto. Pero, ¿cómo se puede compaginar el emprendimiento y un trabajo por cuenta ajena?
1Si quieres emprender sin dejar tu trabajo, ten muy claros tus objetivos
Le dedicamos al trabajo una media de 10 horas al día, contando el tiempo que pasamos trabajando y los desplazamientos. Además, también tenemos que atender a nuestra vida personal y, por supuesto, descansar. Así que, si quieres emprender, vas a tener que quitarle tiempo a otras cosas.
Sacrificar tu tiempo te resultará algo más sencillo si tienes muy claro por qué lo haces. Si siempre es importante tener claro cuáles son los objetivos que buscamos al emprender, si tienes que compaginar esta etapa con un trabajo, es fundamental que tengas unos objetivos que te ayuden a motivarte.