El banco alemán Deutsche Bank finalizará para 2025 todas sus actividades a nivel global relacionadas con la minería de carbón, con el objetivo de «ayudar en la transformación hacia una economía sostenible», según su nueva hoja de ruta sobre combustibles fósiles, publicada este lunes.
La estrategia de la entidad abarca tanto financiación como transacciones en los mercados de capitales. En este sentido, Deutsche Bank no financiará nuevas centrales térmicas de carbón y establece una serie de principios sobre cómo debe actuar la entidad con empresas que sean dependientes en más de un 50% del carbón. Estas empresas solo podrán acceder a fondos de Deutsche Bank si presentan «planes de diversificación creíbles».
La firma revisará todas sus relaciones con sus clientes a este respecto en Europa y Estados Unidos a finales de 2020, mientras que realizará el mismo ejercicio en Asia a principios de 2022. El banco ha explicado que la revisión comenzará más tarde en esta última región porque es mucho más dependiente del carbón que las demás.
Asimismo, Deutsche Bank no financiará proyectos de petróleo o gas que empleen la técnica del ‘fracking’ en países con escasez de agua. Tampoco financiarán proyectos de crudo y gas en la región del Ártico o proyectos de arenas petrolíferas, incluyendo la exploración, la producción, el transporte y el procesado.