La marca automovilística Seat ha incorporado a la oferta mecánica del nuevo León dos versiones de acceso a la gama, por lo que ahora estará disponible con un motor de gasolina de 1.0 litros TSI de 110 caballos de potencia y con un propulsor de diésel de 2.0 litros TDI de 115 caballos en su carrocería de cinco puertas y con el acabado Style Launch Pack.
Tal como ha indicado la firma de Martorell (Barcelona), el propulsor de diésel de 2.0 litros TDI CR con 150 caballos y caja de cambios automática de siete velocidades amplía su disponibilidad ahora también con el acabado Style, tanto en el modelo de cinco puertas como en la versión familiar.
El nuevo propulsor de gasolina de 110 caballos marca un consumo medio de entre 5,2 y 6 litros cada 100 kilómetros, con unas emisiones de entre 119 y 137 gramos de dióxido de carbono (CO2) por kilómetro recorrido.
Por su parte, el motor de diésel de 115 caballos tiene un consumo que oscila entre los 4,1 litros y los 4,7 litros por cada 100 kilómetros, mientras que emite entre 107 y 124 gramos de CO2 por kilómetro.
A la espera de la llegada de las versiones de gas natural comprimido (GNC) e híbrida enchufable, el nuevo León ya está disponible en el configurador de Seat con mecánicas TSI de gasolina, TDI de diésel y la opción microhíbrida eTSI.
«La gama de motores del nuevo compacto de Seat marca un antes y un después en la compañía, ofreciendo por primera vez hasta cinco sistemas de propulsión diferentes en un modelo y disponiendo así de etiquetas medioambientales ‘C’, ‘ECO’, y ‘Cero’, con el objetivo de adaptar su oferta comercial a cualquier necesidad de los clientes», ha subrayado la empresa.
De esta forma, la marca del grupo Volkswagen ofrecerá el León con mecánicas que irán desde los 90 caballos de potencia hasta los 204 caballos, asociadas a cajas de cambio manuales de seis velocidades o automáticas de siete marchas.