Diaphanum ha eliminado su participación en la Bolsa española, para favorecer la Bolsa de Estados Unidos en las carteras de sus clientes con su nueva estrategia de inversión por la crisis del coronavirus, donde ve oportunidades para apostar por la deuda corporativa.
«Mantenemos cierta posición indirectamente con fondos europeos que tienen cierto peso de España, pero ya no tenemos fondos directamente de Iberia o España, por las malas perspectivas de recuperación», ha señalado el director de inversiones de Diaphanum, Miguel Ángel García, en una rueda de prensa telemática este miércoles.
La sociedad de valores ya había comenzado a reducir su peso en la renta variable europea y española en enero, cuando contaban con el fondo ‘Magallanes Iberian Equity’ de la gestora capitaneada por Iván Martín, que fue una de las apuestas que les restó rentabilidad en 2019.
En este sentido, Diaphanum ha dado más peso a la Bolsa estadounidense, a la que todavía ve oportunidades de revalorización, pero sin llegar a los niveles de comienzos de año, ya que esperan que esta situación desemboque en una recesión económica. «No es un alto en el camino de un periodo alcista, la situación ha cambiado», ha señalado García.
La sociedad de valores ha modificado su estrategia pasiva de indexación al S&P500 por un enfoque de gestión activa, incorporando el fondo ‘Vontobel US Equity’. Además, han cambiado su visión geográfica por un acercamiento más sectorial, con la apuesta por el consumo no cíclico y el sector salud, toda vez que han descartado lo relacionado con el sector turismo.
RENTA FIJA
La firma considera que es un buen momento para invertir en bonos corporativos y es partidaria tanto de la exposición al ‘high yield’ como a los bonos ‘investment grade’, donde prevé que los diferenciales regresen a la media histórica y logren plusvalías importantes.
De hecho, el director de inversiones de Diaphanum ha descartado que se produzcan quiebras de empresas generalizadas, ya que considera que se han tomado «medidas históricas» para salvar el tejido empresarial tanto fiscales como de compra de bonos por los bancos centrales. «El mercado ya ha descontado unos grados altísimos de ‘defaults’ y no se van a producir esa cantidad de suspensiones de pago», ha sostenido García.
BONOS CATÁSTROFE
Entre las apuestas «más exóticas» de la firma, que ha reducido el peso sus inversiones alternativas, destaca la inversión en «bonos catástrofe», unos bonos 100% colateralizados cuyo cupón y devolución del principal depende de que no ocurra un desastre naturales de una tipología y magnitud concretas y predefinidas.
Estos ‘cat bonds’, invertidos contra la liquidez de las carteras, logran descorrelacionarse del mercado y Diaphanum espera obtener rentabilidades de hasta el 8% con un riesgo «relativamente bajo». Para esta inversión, han optado por una entrada escalonada y diversificada por regiones, ya le han dado un peso del 1,5% en las carteras medias y prevén aumentar hasta el 4% en los próximos dos o tres años.