El consejero delegado de Banco Sabadell, Jaime Guardiola, ha pedido que se ponga en valor el esfuerzo que está realizando la banca y sus empleados en la situación excepcional que se está viviendo derivada de la expansión del coronavirus.
«La banca necesita un poco de reconocimiento y menos tortazos», ha señalado Guardiola durante la rueda de prensa posterior a la presentación de los resultados correspondientes al primer trimestre de 2020.
El ‘número dos’ de Banco Sabadell ha explicado que es «muy fácil» ‘pegarle’ a los banqueros cuando se critica la lentitud de la concesión de financiación a empresas a través del ICO, pero ha subrayado que este ataque al final le afecta más a los empleados que son los que están tramitando todas las operaciones.
Es normal que la gente esté nerviosa porque tiene que hacer frente a sus pagos. Pero creo que en este mundo de exageraciones en el que vivimos existe una falta de respeto a los profesionales de la banca que me duele muchísimo y me indigna», ha añadido.
El banquero ha explicado que se han tramitado en 15 días unas 60.000 operaciones, lo que representa el trabajo de seis meses en un contexto normal. Además, ha recalcado que todo se ha hecho siguiendo los habituales circuitos de riesgo.
En este sentido, ha reconocido que cuando se dibujó el esquema de las garantías públicas se tuvieron dudas sobre la capacidad, pero cree que «francamente está yendo bien».
DA POR HECHO QUE SE COMPLETARÁ EL TERCER TRAMO Y PIDE UN CUARTO
En esta línea, Guardiola da por hecho que el tercer tramo ya se lo han ‘comido’ y pide que se desbloquee un cuarto tramo de los 100.000 millones habilitados en el programa. «Hemos hecho los dos tramos, el tercero es obvio», ha precisado.
Banco Sabadell no se atreve a decir si va a ser suficiente con los 100.000 millones de euros, por lo que pide flexibilidad en caso de que existan más necesidades. En cualquier caso, ha señalado que el esquema «teóricamente» tiene que dar y ha puesto en valor el esfuerzo que está realizando el Estado.
MEDIDAS DIRECTAS PARA LAS PEQUEÑAS EMPRESAS
El consejero delegado de la entidad catalana ha admitido que le preocupa determinado tramo de empresas, sobre todo las más pequeñas, debido a que quizá no se pueden endeudar más y no están acudiendo al ICO.
Para estos casos, cree que es necesario que se tomen medidas directas y no de garantías, como está ocurriendo en Alemania o en Australia. «Se necesitan mecanismos de ayuda directa para la parte más pequeña de la economía, hay que cuidarla mucho», ha añadido.
En su opinión, esta es una de las asignaturas que tiene que revisar el Gobierno, si bien ha destacado que el resto han sido «buenas, coordinadas y de reacción rápida», que han permitido reducir incertidumbre.
No obstante, también ha apelado a una flexibilización de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), ya que la recuperación será muy desigual entre sectores y tamaños de empresas.
Respecto a la desescalada, ha descartado en principio que el banco vaya a realizar test masivos a sus empleados y ha confirmado que el retorno a las oficinas se irá haciendo en función de las recomendaciones que haga el Gobierno. El teletrabajo de los empleados de servicios centrales se mantendrá por más tiempo, de forma que se irán abriendo las oficinas en función de la demanda.
«Vamos a ir desescalando muy lento en servicios centrales y adaptando las oficinas en función de la demanda. Queremos hacer las cosas bien», ha subrayado.