El contrato mercantil es un documento esencial a la hora de establecer una relación jurídica entre el autónomo y otra persona física o jurídica con la que vaya a trabajar. Con frecuencia, se asimila la firma de este tipo de contrato con la figura del falso autónomo, y es cierto que muchas veces el contrato mercantil intenta esconder una relación laboral. Pero lo cierto es que se puede firmar un documento de este tipo y ser un autónomo totalmente legal.
Es importante tener en cuenta que a través de este contrato nacen obligaciones para ambas partes implicadas, pero que en ningún caso este da lugar a una relación laboral. Para eso habría que haber un firmado un contrato laboral, algo que en el caso del autónomo daría lugar a un estado de pluriactividad.
1¿Qué es el contrato mercantil?
Es un documento a través del cual una empresa o un autónomo contrata a un autónomo para que este ser encargue de la prestación de ciertos servicios o la entrega de determinados productos. Por ejemplo, una empresa de zumos puede celebrar un contrato con un autónomo para que este le provea de fruta con la que elaborar sus productos.
Como es lógico, el autónomo adquiere la obligación de entregar los productos o servicios a los que se ha comprometido, mientras que la otra parte queda obligada al pago de esos bienes o servicios en el tiempo y forma acordados. Si cualquiera de las partes incumple, la otra podrá acudir a los tribunales a exigir el cumplimiento del contrato o incluso para darlo por finalizado antes de tiempo.
