Existen muchas formas de recorrer Europa de forma asequible, y así conocer las ciudades y capitales más impresionantes del viejo continente. Pero si te puede la nostalgia de viajar en tren como en épocas pasadas, o simplemente eres un fan de los trenes, debes saber que existen formas de viajar a través de los países europeos en este medio de transporte.
Además, no solo es una alternativa a viajar en avión, sino que puede ser una gran opción para descansar y disfrutar más del viaje. De esa forma podrás dejar atrás la rutina y vivir una experiencia nueva sin la fugacidad de los viajes en avión. Eso sí, para hacer este tipo de viajes lo debes planificar previamente bien, para hacer todo el itinerario que quieras recorrer sin problemas y en los tiempos que estimas.
Viajando en tren se te da otra posibilidad, y es la de descansar y dormir en el propio tren mientras viajas (en los distintos trenes nocturnos que existen por Europa). Es decir, algo así como un crucero por tierra, en el que vuelves para seguir la ruta en vez de tener que pernoctar en un hotel u otro tipo de alojamiento en cada uno de los lugares que visitas. Eso también abarata los costes en alojamientos, lo que puede resultar interesante.
Así puedes viajar por Europa en tren
Más ventajas de viajar por este medio por Europa
Además de todo lo dicho en el apartado anterior, tienes que considerar otras muchas ventajas que tendría viajar en tren por Europa, como son:
- Las tarifas que vas a encontrar para los trenes para viajar a nivel de Europa son bastante baratos. En algunos casos te puede sorprender lo baratos que pueden llegar a ser, incluso más que algunos tramos nacionales en alta velocidad.
- Puedes elegir entre viajar por el día o por la noche. Lo bueno de hacerlo por la noche es que puedes dormir en el tren y despertarte justo en el lugar destino que hayas elegido.
- La puntualidad de los trenes, salvo problemas, es muy superior a la de los autobuses y los aviones, que suelen sufrir retrasos con mayor frecuencia. Aunque, puede que en alguna ocasión un tren llegue alto tarde… La media de trenes puntuales en Europa suele ser del 90%. Eso evitará que tengas que lidiar con cambios imprevistos.
- Los trenes son más espaciosos, y puedes llevar las maletas contigo. Eso te evita tener que esperar, sufrir pérdidas, etc. Además, sus asientos suelen tener algo más de espacio para mayor comodidad. Incluso si el viaje es muy largo, podrás dar un paseo por el tren, ir al baño, etc.
- La mayor parte de los trenes tienen uno o varios vagones con cafetería y comedor para tomarte algo si te apetece. Además, en algunos servicios se pueden incluir algunas prestaciones extra para los viajeros.
- Cuando tengas que entrar o salir del tren, o ir a otro tren, los procedimientos de seguridad son mucho más ágiles que en aeropuertos. Eso reduce los tiempos perdidos.
- En el avión no se puede apreciar tan bien los paisajes cuando viajas, especialmente si está muy nublado. En el autobús, al ir por rutas de carretera tampoco suele haber paisajes tan imponentes. Pero los trenes sí que permiten ver algo más de paisajes durante el viaje.
- La ubicación de las estaciones de tren importa. Mientras los aeropuertos suelen estar en zonas más alejadas de las ciudades y necesitas coger otro medio de transporte para llegar a la ciudad, en el caso de las estaciones de tren se encuentran dentro de la propia ciudad. Por lo que te dejará justo donde necesitas para comenzar tu aventura.
- Si te importa el medio ambiente, los trenes eléctricos son mucho más ecológicos, sin emisiones. Algo que es un punto a su favor frente a los contaminantes cruceros, aviones, así como las emisiones de los autobuses.
