Los billetes falsos llevan años existiendo, pero cada vez la tecnología hace que sean más difíciles de detectar. Aunque por otro lado, esa misma tecnología también se aplica para poder hacer los billetes cada vez más difíciles de falsificar y que se puedan detectar las falsificaciones de forma sencilla. Es una lucha entre dos mundos, el del crimen y el de las autoridades.
Por lo general, algunos optan por comprar billetes de atrezo usados en el cine. Están al alcance de cualquiera, son baratos y se pueden obtener grandes cantidades para luego irlos repartiendo en pequeños comercios que no comprueban los billetes al pagar y así obtener las vueltas para tener ganancias en dinero real. En otros casos, se crean máquinas de imprenta de tecnología avanzada para hacer copias que sean complicadas de diferenciar.
La tecnología tras los billetes falsos y cómo identificarlos
Claves para identificarlos II
Por lo general, si no tienes un detector de billetes falsos, a simple vista no es sencillo de comprobar. La textura y aspecto son casi iguales.
La policía ha estado siguiendo a estos delincuentes y ha dado algunas claves para que no te engañen y se basa en «tocar, girar y mirar»:
- Calidad de la impresión y detalles. Se nota en la textura, ya que los auténticos se crean con fibras de algodón y los falsificados en papel. Los relieves de las barras y letras también son un indicativo de que es un billete auténtico. Los falsos no tienen relieve.
- Al girar el billete, el color del valor del billete de la zona inferior izquierda cambiará de color.
- Si lo miras a contraluz, los falsificados no tienen detalles holográficos en la banda plateada.
