La famosa compañía de refrescos se ha comprometido a disminuir las emisiones nocivas de sus operaciones directas en un 50% a 2025 y en un 35% las producidas por la cadena de valor de Coca-Cola, en el marco de la Cumbre del Clima (COP25) que se está celebrando en Madrid.
En concreto, la multinacional de bebidas ha querido reforzar su compromiso contra el cambio climático y su contribución al cumplimento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) establecidos por la Naciones Unidas.
De esta forma, la compañía ha establecido como uno de sus principales objetivos reducir su huella ambiental. Para ello, desde 2010, tiene en marcha un programa de descarbonización de todas las actividades de su cadena de valor, con el objetivo de reducir un 50% de las emisiones de sus operaciones directas (producción, transporte y equipos de refrigeración) y un 35% en toda la cadena de valor (ingredientes, envases y operaciones directas).
En la actualidad, la huella de carbono de Coca-Cola en Iberia se genera de la siguiente manera: un 35% procede de las operaciones directas (8% de las plantas de producción, un 10% de la flota y un 17% de los equipos de frío) y un 65% del resto de la cadena de valor (20% de ingredientes, 45% de los envases).
En el período 2010-2018, Coca-Cola en España ha reducido sus emisiones en sus operaciones directas en un 44,8%, gracias a la mejora en los procesos de producción con medidas específicas en cada planta, equipos de refrigeración más eficientes y la utilización de electricidad renovable en todas sus instalaciones en España, entre otros.
Respecto a la reducción de emisiones en la cadena de valor y también en esos años, ha conseguido reducirlas en un 30,2%, con acciones de mejora en los procesos de cultivo o producción de sus ingredientes y con un foco especial en el área de envases.
COCA-COLA TRABAJA EN LA SOSTENIBILIDAD DE SUS ENVASES
De esta forma, se compromete a asegurar que el 100% de sus principales ingredientes agrícolas provengan de recursos sostenibles en 2025. En 2018, el 73% de sus proveedores estaban ya comprometidos con sus Principios Rectores de Agricultura Sostenible (SAGP).
Por otro lado, la multinacional busca trazar una ruta hacia la economía circular y la reducción de las emisiones de sus envases, gestionándolos de forma sostenible.
En el área de eco-innovación, en 2019, se han invertido en Europa Occidental, 180 millones de euros en el desarrollo de tecnología para la búsqueda de envases más sostenibles y que sean 100% reciclables.
Asimismo, se ha propuesto eliminar el plástico innecesario, como las anillas de plástico o ‘hi-cone’ en aquellas referencias en las que sea posible, o el paso de agrupaciones de film a cartón, como el reciente lanzamiento en los packs de latas de 200 mililitros.
Respecto a la recuperación, Coca-Cola se ha comprometido a recoger el equivalente al 100% de los envases que pone en el mercado en el año 2025. Además, en el canal Horeca fomenta el uso del envase de vidrio retornable, que puede reutilizarse una media de 25 veces al ser completamente reciclable y muy resistente.