La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha afirmado este viernes que el Gobierno mantiene su intención de subir el precio del diésel para equipararlo progresivamente al de la gasolina, en línea con las peticiones de la OCDE de subir los impuestos de los combustibles por el impacto medioambiental, si bien ha rechazado la petición del organismo de abaratar los despidos.
«Toda Europa se tiene que poner las pilas en fiscalidad medioambiental, el medio ambiente no espera», ha señalado Monero en declaraciones en La Sexta, recogidas por Europa Press, en las que ha afirmado que el Gobierno mantiene su medida, recogida en el proyecto de Presupuestos de 2019, de ir «de forma progresiva equiparando el diésel a la gasolina, sin que ello tenga impacto en los conductores profesionales».
«No vamos a compartir los despidos a la baja y las indemnizaciones a la baja que provoquen una mayor facilidad de despido»
Montero ha indicado que no tiene «ningún sentido» que no exista la equiparación impositiva entre los dos combustibles, y ha subrayado que la propuesta de la OCDE está «en consonancia» con lo que venía transmitiendo ya el Gobierno de Pedro Sánchez.
Según la ministra en funciones, la equiparación entre gasoil y gasolina es una medida «disuasoria» más que «recaudatoria», y las tasas en materia de fiscalidad medioambiental deberían implantarse de forma «unánime» en todos los países de la UE, al ser una cuestión relativa a la «emergencia» del cambio climático. «Todo lo que no hagamos ahora no va a tener capacidad de recuperación en el futuro», ha apostillado.
«ESTUDIAREMOS UNA FÓRMULA PARA DISMINUIR LA PRECARIEDAD»
Respecto a la propuesta de la OCDE de equiparar contratos temporales y fijos y abaratar así el despido, Montero ha enfatizado que para el Gobierno es una «prioridad» luchar contra la precariedad laboral y que se cree empleo de calidad, por lo que en el futuro se estudiará una «fórmula» para disminuir más la precariedad, tras los primeros pasos dados a través de Inspección de Trabajo.
En este sentido, ha abogado por «ahondar» en estas medidas contra la precariedad. «No vamos a compartir los despidos a la baja y las indemnizaciones a la baja que hagan que muchas fórmulas neoliberales relativas a la materia provoquen una mayor facilidad de despido», ha remarcado.
En su lugar, ha apostado por el diálogo social, el nuevo Estatuto de los Trabajadores y por derogar los aspectos más lesivos de la reforma laboral de 2012, puntos que espera poder negociar con Unidas Podemos.
La ministra en funciones ha mostrado su confianza en poder formar Gobierno «cuanto antes» que presente las cuentas públicas, que «podrán ser del año 2019 o de 2020, dependiendo del momento», a pesar de que ayer la ministra de Economía en funciones, Nadia Calviño, dio por hecho que no verán la luz las cuentas públicas del ejercicio actual.
«Está en juego la gobernabilidad del país, no se puede comportar como el perro del hortelano», ha añadido Montero sobre las formaciones de derechas en referencia a las negociaciones para conformar Ejecutivo.