Todos queremos dieta en verano. Realmente, el tema de adelgazar es algo que suele traer de cabeza a gran parte del mundo, y más aún si es justo antes de que llegue el verano, que es cuando te tienes que destapar y enseñar «carne».
Los cánones de belleza dictan que hay que tener un peso «ideal», pero en la mayoría de las ocasiones no es eso lo esencial. Adelgazar es saludable para algunas personas y que puedan llevar una calidad mejor de vida.
Seguro que te preguntas qué comer o qué no comer para poder perder algunos kilos sin complicarte demasiado. No es tan importante comer poco como comer bien.
Es fundamental también acompañar la dieta con ejercicios que tonifiquen la zona que desees adelgazar y complementarlos con actividades cardiovasculares que te ayuden a quemar la grasa sobrante concentrada en ciertas partes del cuerpo.
Tomate
El tomate es una fuente genial de minerales, fibra y vitaminas. También es un excelente desintoxicante, depurador y quema grasas natural del cuerpo.
El color rojo del tomate se debe a su contenido en licopeno, que estimula la producción del aminoácido carnitina, que ayuda a que quemes grasas. La vitamina C de la fruta potencia el efecto del licopeno.
Además de adelgazar el comer tomate también te está ayudando en:
- Previene el cáncer de próstata, pulmón y digestivo.
- Reduce los niveles de colesterol LDL.
- Ayuda con las enfermedades cardiovasculares.
- Mantiene la piel tersa.
- Combate el envejecimiento corporal y rejuvenece los tejidos.
Existe una dieta que trata de comer tomate en todas las comidas del día. La receta se hace con 2 tomates frescos y maduros, el zumo de medio limón y 400ml de agua. Como variante le puedes añadir dos dientes de ajo y unas hojas de albahaca o menta para no cansarte del mismo sabor.
Este alimento no contiene colesterol, ni grasas saturadas, ni sodio.
