Los cambios societarios que ha realizado Goldman Sachs en Alemania y su inscripción en el Registro de Entidades de Crédito del Banco de España están más relacionados con los posibles cambios legislativos en Reino Unido a consecuencia del brexit que con su planes reales para su sucursal en España.
La sucursal en España del gigante norteamericano fue inscrita en el Registro de Entidades de Crédito del Banco de España el 22 de octubre de 2018, de acuerdo a una resolución firmada por el secretario general del organismo público, Francisco-Javier Priego Pérez, y publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el 31 de octubre.
Este hecho hizo pensar que podría lanzar un servicio de banca comercial y minorista en España a través de Marcus. Sin embargo, desde Goldman Sachs han desmentido tal objetivo. La plantilla que tiene la entidad en Madrid está “centrada única y exclusivamente en banca de inversión, banca privada y gestión de activos que ofrece a través de Goldman Sachs International Sucursal en España, registrada en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) con el número 28”, han explicado fuentes internas.
GOLDMAN SACHS, SIN CAMBIOS EN ESPAÑA
Goldman Sachs ha constituido en Alemania (Goldman Sachs AG) un banco del que colgarán las filiales-país en Europa. De forma complementaria, en agosto pasado, para preparar la parte de la estructura de la sucursal española, Goldman Sachs AG se fusionó con una sociedad que Goldman tenía en España sin apenas actividad, Goldman Sachs Gestión SAU. “Estos movimientos tienen que ver con aspectos preparatorios de cara al brexit, no con Marcus o presuntos planes para operar en banca retail en España”, inciden desde el banco de inversión con oficinas centrales en Nueva York.
Del mismo modo, el banco ha hecho hincapié en que no tiene infraestructura ni plantilla suficientes como para abordar por ahora un proyecto de este calado en España. La entidad norteamericana está presente nuestro país desde 1984, año en el que abrió su oficina de Madrid.
Desde entonces, Goldman Sachs ha jugado un papel relevante en el ámbito financiero y corporativo español. Es uno de los agentes más relevantes en renta variable española y los mercados de renta fija, y un bróker activo en bonos soberanos y gestión de banca privada. En cuanto a las operaciones corporativas, ha participado en los procesos de privatización de grandes empresas, como Repsol o Telefónica.