El Tribunal Supremo echa el freno a la sentencia publicada ayer sobre quién tiene que pagar el impuesto sobre actos jurídicos documentados (IAJD), bancos o cliente, y avoca al pleno a decidir si «dicho giro jurisprudencial debe ser o no confirmado».
El presidente de la Sala Tercera, de lo Contencioso-administrativo, del Tribunal Supremo, Luis María Díez-Picazo, ha publicado una nota de prensa dado que la sentencia nº 1505/2018 supone «un giro radical en el criterio jurisprudencial hasta ahora sustentado» y tiene una «enorme repercusión económica y social«.
Por este motivo, Luis María Díez-Picazo ha acordado de manera urgente «dejar sin efecto todos los señalamientos sobre recursos de casación pendientes con un objeto similar«. Por tanto, será el pleno de la Sala quien decida si el IAJD lo pagan el banco o, como hasta ahora, el cliente.
Los plenos de la sala del Tribunal Supremo se celebran con periodicidad móvil y pueden llevar uno o varios puntos de día, así que el revuelo levantado ayer se aplaca sin fecha dejando a bancos y clientes sin saber qué hacer.
BANCOS Y CLIENTES, PERDIDOS
Tras una nueva interpretación de la ley del impuesto sobre transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados y su reglamento, el tribunal concluyó en una sentencia del 16 de octubre que no es el prestatario (el cliente que firma la hipoteca) el sujeto pasivo de este impuesto sino la entidad. El banco tiene interés en inscribir la operación y elevarla a escritura pública. Por tanto, el abono es responsabilidad de él, no del cliente.
El impuesto sobre actos jurídicos supone uno de los mayores costes en la formalización de una hipoteca. En concreto, oscila entre el 0,5% y el 2% sobre el importe del préstamo, según la legislación de cada Comunidad Autónoma. El valor medio de las hipotecas para viviendas del pasado julio se situó en 125.120 euros, según los datos publicados por el INE. Por tanto, este gravamen estará entre 625 euros y 2.502 euros.
La Asociación Española de Banca (AEB), la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) y la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (UNACC) mostraron la unidad del sector a través de un comunicado conjunto y anunciaron que «a partir de esta sentencia, cumplirán con el nuevo criterio establecido por el Tribunal Supremo«.
La noticia cayó como una losa en la cotización de todas las entidades financieras en el Ibex 35. Al cierre de la sesión de ayer, todos los bancos registraron caídas: Bankia (-5,11%), Bankinter (6,27%), BBVA (-2,70), CaixaBank (-4,54%), Sabadell (-6,70%) y Santander (-2,05%).