Cómo deberías interpretar la etiqueta de los alimentos

La etiqueta de los alimentos contienen información sobre sobre la cantidad de calorías, porciones y datos nutricionales de los alimentos. Leer la etiqueta de los alimentos te ayudará a hacer elecciones saludables al hacer las compras.

Sobre la etiqueta de los alimentos

Las etiquetas de los alimentos te informan los datos nutricionales de los alimentos que vas a comprar. Usa estas etiquetas para poder escoger los alimentos más saludables.

Qué se debe buscar en etiqueta de los alimentos

Siempre verifica primero el tamaño de la porción. Toda la información en la etiqueta de los alimentos se basa en el tamaño de ésta. Muchos paquetes contienen más de una porción.

Por ejemplo, el tamaño de la porción para los fideos con frecuencia es 56 g crudos o 1 taza (0.24 litros) cocidos. Si quieres comer 2 tazas (0.48 litros) en una comida, estarás consumiendo 2 porciones. Es decir, dos veces la cantidad de calorías, grasas y otros elementos que aparecen en lista en la etiqueta.

Etiqueta de los alimentos

La información calórica, de la etiqueta de los alimentos, te indica el número de calorías en 1 porción. Ajusta el número de calorías si comes porciones más pequeñas o más grandes. Este número te ayudará a determinar cómo los alimentos afectan tu peso.

El total de carbohidratos está listado en letra negrilla para que se destaque y se mide en gramos (g). El azúcar, el almidón y la fibra vegetal conforman los carbohidratos totales que aparecen en la etiqueta. El azúcar aparece por separado. Todos estos carbohidratos elevan su azúcar en la sangre.

Si tienes diabetes y cuentas los carbohidratos, usa el número de carbohidratos totales.

La fibra vegetal aparece justo debajo de los carbohidratos totales. Compra alimentos que tengan al menos de 3 a 4 gramos de fibra vegetal por porción. Los panes integrales, las frutas y verduras, al igual que las alubias y legumbres son ricos en fibra.

Verifica la grasa total en 1 porción. Presta atención especial a la cantidad de grasa saturada en 1 porción, que viene especificada en la etiqueta de los alimentos.

Escoge los alimentos que sean bajos en grasa saturada. Por ejemplo, bebe leche descremada o al 1% en lugar de leche al 2%. o leche entera. La leche descremada tiene solo una pequeña cantidad de grasa saturada. La leche entera tiene 5 gramos de grasa trans por porción.

El pescado es mucho más bajo en grasa saturada que la carne de ternera. 84 g de pescado tienen menos de un gramo de esta grasa. 84 g de hamburguesa tienen más de 5 gramos.

Etiqueta de los productos

Si un alimento tiene menos de 0.5 gramos de grasa saturada en el tamaño de la porción en la etiqueta, el fabricante de dicho alimento puede decir que no contiene grasa saturada. Recuerda esto si comes más de una porción.

También tienes que prestarles atención a las grasas trans en cualquier etiqueta de alimentos. Estas grasas elevan su colesterol «malo» y reducen su colesterol «bueno».

Las grasas trans se encuentran principalmente en refrigerios y postres. Muchos restaurantes de comida rápida utilizan estas grasas para freír.

Si un alimento contiene estas grasas, la cantidad aparecerá en la etiqueta debajo de la grasa total. Las grasas se miden en gramos. Busque alimentos que no tengan grasas trans o que tengan un contenido bajo de ellas (1 gramo o menos).

El sodio es el ingrediente principal de la sal. Este número es particularmente importante para las personas que estén tratando de consumir menos sal en su alimentación. Una etiqueta que diga que un alimento tiene 100 mg de sodio significa que éste tiene aproximadamente 250 mg de sal. Usted debe consumir menos de 2,300 mg de sodio al día. Pregúntele a su proveedor de atención médica si debe consumir aún menos.

El porcentaje del valor diario está incluido en la etiqueta como una guía.

El porcentaje de cada artículo en la etiqueta se basa en una persona que consume 2.000 calorías al día. Sus metas serán diferentes si usted come más o menos calorías por día. Un nutricionista o su proveedor le pueden ayudar a establecer sus propias metas nutricionales.