Cómo debes tomar correctamente las rotondas (¡y casi nadie lo hace bien!)

Las rotondas suelen crear conflictos. De hecho, hace poco se ha hecho viral una noticia sobre las multas de 200 euros a las que deberemos hacer frente si seguimos circulando por ellas tan mal como lo solemos hacer.

Fuente habitual de accidentes como golpes, sustos y colisiones, existe una conducta más peligrosa que las demás según fuentes de la Policía. Advierte que esta se produce cuando los conductores salen de las mismas directamente por el carril interior. Aunque es una acción de lo más habitual, tenemos que pensar que cuando lo hacemos no solo nos ponemos en peligro a nosotros mismos, sino también a los demás vehículos que circulen por el carril externo.

Esta práctica se denomina como «atrochar rotondas». Y, para que no sigamos haciéndolo, te explicamos cómo se deben tomar de forma correcta y no caer en ningún susto desagradable.

La prioridad siempre la tiene el de dentro

prioridad

Cuando vamos a incorporarnos a una rotonda, tenemos que tener claro que la preferencia siempre la tienen los vehículos que circulan por dentro de la misma.

Es decir, debemos ceder el paso de forma obligatoria a aquellos que ya se encuentren circulando en su interior antes de incorporarnos nosotros. De no hacerlo, podemos provocar un accidente que sería nuestra culpa por no respetar las normas de circulación.

Podemos pensar que es algo obvio y una de las primeras cosas que nos enseñan en las autoescuelas. Sin embargo, es algo que la mayoría de personas que circulan en rotondas suelen pasar por alto.

No salgas desde el carril interior

no salgas del carril interior rotondas

Esta es la acción del conflicto que ha surgido recientemente y de la que la Policía advierte por ser una de las consideradas más peligrosas.

Nunca se debe tomar una salida mientras circulamos desde el carril interior de la misma, pues los vehículos que circulan por el carril derecho pueden no ver nuestras intenciones, y viceversa, y es muy fácil que colisionemos en un descuido o por no ponernos de acuerdo en la preferencia de salida.

Por ello, lo suyo es salir siempre desde el carril derecho, situándonos en el mismo siempre con la suficiente antelación para que nos dé tiempo a realizar la maniobra sin ponernos en peligro ni a nosotros mismos, ni a los demás vehículos que circulen por la rotonda.

Incorpórate por la derecha

incorporación derecha

Cuando te incorpores a las rotondas, debes realizar siempre la maniobra desde el carril situado a la derecha. De hecho, siempre que podamos es por el carril por el que se debe circular en cualquier momento.

Si tu camino es recto, no emplees la rotonda como una intersección en cruz, pues esto es una maniobra considerada como de alto peligro. La razón es que si circulamos no debemos nunca cruzar carriles, pues no sabemos lo que nos podemos encontrar.

Esto parecen recomendaciones muy sencillas y que a priori todos conocemos. Sin embargo, parece que conocerlas no es suficiente, ya que apenas nadie las cumple y prácticamente todo el mundo las suele hacer mal.

Cómo salir de la rotonda

cómo salir rotondas

Para salir de forma correcta de las rotondas hay que tener algunas cosas en cuenta. Por ejemplo, si vamos a salir de la misma por la primera salida a la derecha o recto, debemos situarnos preferentemente en el carril de la derecha.

En cambio, si nuestra intención es salir por el carril de la izquierda o realizar un cambio de sentido o giro de 360 grados, debemos entrar siempre por la derecha y situarnos a la izquierda.

Debemos acordarnos siempre, en este último caso, de situarnos en la derecha cuando preveamos que debamos salir. Pues hay que salir siempre por el carril exterior.

Uso del intermitente

intermitentes

Los intermitentes son otros de esos elementos que muy poca gente utiliza, sobre todo en las rotondas. Y muy mal hecho, pues es un indicador de gran importancia para la correcta circulación.

Siempre debemos accionar el intermitente para indicar nuestra intención de salir de la rotonda o para señalar un cambio de carril cuando nos encontremos en el interior de la misma.

Si vamos a continuar recto o dentro de la rotonda, no lo tenemos que emplear.

Facilita la entrada

facilitar entrada

Cuando circulamos por el carril derecho dentro de una rotonda y vemos la intención de un vehículo de incorporarse a la misma, también debemos tomar algunas precauciones.

No es obligatorio desplazarse al carril central o interior de la misma. Sin embargo, siempre que sea posible tenemos que facilitar que ese vehículo pueda incorporarse de forma sencilla y segura.

Esto es algo que tampoco muchos conductores tienen en cuenta. Es cierto, no es obligatorio, pero siempre es bueno, en la medida de lo posible, facilitar la incorporación.

Sitúate de forma correcta

situación correcta

Si nos encontramos en una calle de dos o más carriles, debemos situarnos en el carril que resulte más apropiado a nuestra intención de circulación.

En el caso de que vayamos a salir por la primera salida a la derecha, nos debemos situar en el carril que se encuentre más a la derecha. En cambio, si nuestra intención es salir recto o hacia la izquierda, nos situaremos en el carril de la izquierda para poder circular, siempre que sea posible, por el carril de la izquierda o interior de la rotonda.

Esto es algo lógico, siempre que sea posible, nos situaremos en el carril que facilite la maniobra que vayamos a hacer después.

Pasos de peatones

paso peatones

En zonas urbanas, debemos tener en cuenta otro aspecto muy importante. Y es que, en las salidas o entradas a las rotondas, puede haber, y suele haberlos, pasos de peatones.

Aquí hay que extremar la precaución, pues puede que por ellos estén cruzando o tengan intención de cruzar peatones. No olvides que estos siempre tienen preferencia con respecto al vehículo.

Los pasos de peatones son uno de los elementos de la circulación a los que más atentos debemos estar en todo momento. Y mucho más a las salidas o entradas de las glorietas.

Vehículos pesados

vehículos pesados rotondas

Si circulamos por una rotonda, no solo vamos a encontrar coches. También podemos encontrarnos con un vehículo pesado o un autobús.

Si es el caso, siempre debemos pensar que necesitan más espacio para realizar las maniobras. Es decir, pueden necesitar también más espacio para salir o entrar.

Por ello, debemos facilitar en la medida de lo posible sus movimientos, con el fin de poder circular todos de forma efectiva, correcta y sin peligro.