Estas son las líneas de metro que cerrarán en verano

Controversiales, lentas y evidentemente necesarias, las obras de la línea uno del metro empiezan en las próximas semanas, con la idea de poder aumentar la frecuencia con la que los trenes pasan por cada estación. El problema es que para cumplir con estas renovaciones la mitad de la línea uno, entre Sol y Valdecarros, no podrá funcionar por varios meses, en teoría menos de 4, pero que puede superar ese tiempo. 

Desde el próximo 24 de junio las estaciones de Tirso de Molina, Antón Martín, Estación del Arte, Atocha, Menéndez Pelayo, Pacífico, Puente de Vallecas, Nueva Numancia, Portazgo, Buenos Aires, Alto del Arenal, Miguel Hernández, Sierra de Guadalupe, Villa de Vallecas, Congosto, La Gavia, Las Suertes y Valdecarros, no prestarán servicio al menos hasta finales del año. Es un problema serio para los usuarios del servicio, que tendrán que adaptarse a las soluciones temporales que suelen aplicar comunidades y alcaldías.

Más allá de que seguramente los autobuses sirvan para cubrir el servicio, y que otras líneas de metro absorba parte de los pasajeros, sigue siendo complicado pensar que en pleno verano la línea más extensa y antigua del metro interrumpirá su funcionamiento. Visto así es normal que haya algo de ruido de parte de algunos usuarios de las zonas afectadas, pero al mismo tiempo es importante señalar que el mismo sistema se aplicará de nuevo el año que viene entre Sol y Chamartín. 

LOS VECINOS PIDEN MÁS TRANSPARENCIA EN EL PROCESO

Aunque las obras son necesarias sí que hay motivos para señalar la forma en que se han comunicado estas medidas.  Esto es el principal reclamo de parte de las asociaciones de vecinos y sindicatos afectados: «Es normal que se lleven a cabo obras y mejoras, como la necesaria retirada del amianto, pero hacerlo de esta forma es vergonzoso. Estamos muy enfadados. Somos muchos los vecinos que seguimos esperando la confirmación oficial para organizarnos la vida», explica la presidenta de la Asociación PAU Ensanche de Vallecas, Rosi Pérez.

Mientras tanto desde Cibeles el delegado de Medioambiente y Movilidad en funciones del Ayuntamiento de Madrid, Borja Carabante, asegura que se está «concretando» el servicio gratuito de autobuses de la EMT: «Habrá, como siempre un sistema alternativo y gratuito de autobuses que estamos concretando tanto con Metro como con el Consorcio de Transportes de Madrid», sentencia. Si bien esto ayudaría a mejorar la situación no es suficiente para evitar las preocupaciones, en especial sabiendo lo que pasa cuando la Albufera se llena de autobuses.

El otro reclamo es que coincidirán las obras en dos líneas de metro distintas. Por un lado, habrá retrasos en la línea 9, debido a los trabajos de retirada de amianto en las bóvedas de las estaciones de Avenida de América, Núñez Balboa, Concha Espina y Cruz del Rayo, incompatibles con el normal funcionamiento de los trenes. Este trabajo permitirá avanzar también en la renovación de los sistemas de impermeabilización y la mejora de los acabados interiores. No es que alguien señale estas obras como que no fuesen necesarias, sino que las mismas pudieron no coincidir para evitar el exceso de problemas para los madrileños, y los visitantes veraniegos.

UN VERANO ACCIDENTADO PARA EL METRO

Lo cierto es que la suma de estos dos proyectos es delicada para el servicio, sobre todo dado que se trata de la línea más antigua y extensa, y una de las que conecta la zona de mayor movimiento económico de la ciudad con el centro, es suficiente para llamar la atención en cuanto a la planificación. El que los proyectos empiecen a realizarse justo después de las elecciones autonómicas y municipales es suficiente para que algunos tengan dudas importantes.

Lo cierto es que en Madrid, en plena época de vacaciones y calor, habrá un problema importante en cuanto a su principal medio de transporte público. Si bien es cierto que es justo la época en que afecta a menos madrileños, como sabe cualquiera que pase por la capital en la época estival, también es fácil imaginar tener que esperar el autobús bajo una ola de calor de más de 40 grados, y los efectos que esto tenga en el consumo y en el turismo en una fecha clave para ambos, y a mitad de su proceso de recuperación. 

MÁS MADRID Y EL PSOE PRESENTAN MEDIDAS ALTERNATIVAS

A su modo, y con especial saña antes de las elecciones, las dos principales formaciones de la oposición han reclamado contra esta forma de hacer la remodelación. En declaraciones a Madridiario el partido político recordó que en una situación parecida el gobierno de Manuela Carmena informaron temprano de su acuerdo con los autobuses y se organizaron con negocios y vecinos de las zonas afectadas. 

El PSOE, como es de esperarse, ha sido mucho más frontal en su crítica aboganado por una «mayor intensidad en las líneas de autobús» que conecten «tanto con Vallecas como con Retiro». Asimismo, en la línea de la tarifa intermodal única propuesta durante la campaña electoral, Lobato plantea la «gratituidad del ticket Cercanías», que sea también válido para Metro y autobús. 

Ernesto Rodriguez
Ernesto Rodriguez
Periodista, entrevistador e investigador de oficio. Amante del cine, la música y Political Junkie. Escribo de empresas de transporte, cultura y sanidad