El risotto de setas es uno de esos platos que parecen sencillos, pero esconden un universo de matices en cada cucharada. El arroz meloso con setas logra ese equilibrio entre lo rústico y lo sofisticado que enamora al primer bocado. No es casualidad que haya pasado de ser un clásico del norte de Italia a convertirse en protagonista de muchas mesas españolas, sobre todo cuando el otoño trae consigo una explosión de hongos frescos.
Detrás de este arroz cremoso hay algo más que una receta: hay un ritual que invita a cocinar despacio, removiendo con paciencia mientras los aromas se mezclan. Un buen risotto de champiñones o boletus no solo alimenta, también reconforta. Quizá por eso nunca pasa de moda, porque cada temporada vuelve a recordarnos que la cocina más auténtica se disfruta sin prisas y con los cinco sentidos bien abiertos.
EL ENCANTO DE COCINAR CON SETAS DE TEMPORADA
Cuando la lluvia empapa los bosques y aparecen las primeras cestas llenas de níscalos, trompetas negras o boletus, el risotto de setas cobra todo su sentido. Cocinar con hongos frescos transforma un simple arroz en una experiencia gastronómica única. Cada especie aporta un sabor distinto y la mezcla enriquece aún más el resultado final.
Aunque la tentación de usar setas deshidratadas o de cultivo siempre está ahí, nada se compara con el aroma que desprenden las recién recolectadas. Un risotto de setas silvestres regala matices terrosos y profundos imposibles de imitar. Ese contacto directo con la temporada es lo que da al plato un aire de celebración de la naturaleza.
EL ARROZ, EL VERDADERO PROTAGONISTA

No todos los arroces valen para un risotto de setas. Variedades como arborio, carnaroli o vialone nano absorben el caldo sin perder la textura cremosa. Esa capacidad de soltar almidón mientras mantienen su forma es la clave de ese punto meloso que tanto gusta.
El proceso exige paciencia: añadir el caldo poco a poco y remover constantemente. Esa técnica lenta permite que el arroz suelte su esencia y se funda con el sabor de las setas. Es justo en ese vaivén de la cuchara donde ocurre la magia, convirtiendo ingredientes humildes en un plato de alta cocina.
EL PAPEL DEL CALDO Y EL TOQUE FINAL
Un buen risotto de setas no se entiende sin un caldo sabroso que lo acompañe. Usar un fondo casero de verduras o incluso del propio cocido de carne marca la diferencia. Esa base aromática impregna cada grano de arroz y potencia la profundidad del plato.
El remate lo dan dos aliados italianos de lujo: la mantequilla y el queso parmesano. El momento de mantecar el arroz define la cremosidad y el carácter del risotto. Ese gesto final, lejos de ser un capricho, es el que aporta la untuosidad característica que hace que la cuchara vuelva una y otra vez al plato.
RISOTTO DE SETAS: TRADICIÓN Y MODERNIDAD

El risotto de setas ha viajado de las trattorias italianas a los restaurantes de autor sin perder su esencia. Es un plato capaz de moverse entre lo casero y lo sofisticado con la misma naturalidad. En casa funciona como comida de domingo y en alta cocina se presenta con trufas, espumas o aceites aromatizados.
La versatilidad es infinita. Un risotto de setas se adapta tanto a una mesa familiar como a un menú degustación contemporáneo. Esa elasticidad explica por qué sigue siendo uno de los arroces más pedidos y reproducidos, siempre capaz de sorprender con nuevas versiones sin traicionar su alma original.
EL MOMENTO DE DISFRUTARLO
El instante en que el risotto de setas llega a la mesa debe ser casi inmediato, sin esperar demasiado. El arroz cremoso pierde su magia si se deja reposar y por eso hay que comerlo al momento. El calor, la textura y el perfume de las setas deben disfrutarse sin interrupciones.
Una copa de vino blanco fresco, un poco de pan crujiente al lado y la cuchara en mano son suficientes para completar el ritual. Cada bocado funciona como un recordatorio de que la cocina más sencilla puede ser la más inolvidable. Quizá por eso este arroz italiano, con su aire de temporada y su carácter reconfortante, se ha ganado un lugar eterno en nuestro recetario emocional.