domingo, 12 octubre 2025

España se consolida como un paraíso para los extranjeros que compran vivienda prime

El mercado inmobiliario de lujo en España ha vivido un septiembre especialmente dinámico. Según datos de la consultora inmobiliaria The Simple Rent, especializada en el segmento prime, la compraventa de viviendas de alto standing ha crecido un 20% en el último mes.

Pero lo más llamativo no es solo el volumen de operaciones, sino quién está comprando: el 60% de las consultas provienen de clientes internacionales, y más del 21% de las operaciones de viviendas de más de 1,5 millones de euros entre abril y junio fueron protagonizadas por extranjeros.

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Este crecimiento confirma una tendencia ya consolidada: España se está convirtiendo en uno de los destinos predilectos para grandes patrimonios europeos, latinoamericanos y de Oriente Medio que buscan no solo segunda residencia, sino también refugio fiscal, seguridad jurídica, calidad de vida… y oportunidades de inversión.

Las zonas más codiciadas siguen siendo Marbella, Ibiza o la Costa del Sol, pero también despuntan áreas rurales como el Empordà, la sierra madrileña o la Axarquía, donde el lujo discreto gana terreno.

PRIVACIDAD Y OPORTUNIDADES FISCALES

El perfil del comprador de lujo ha cambiado. Según The Simple Rent, el 70% de las búsquedas prioriza la eficiencia energética, la domótica, los paneles solares y la privacidad. Ya no se busca ostentación, sino bienestar, exclusividad y seguridad. Villas ocultas entre pinares, fincas rurales alejadas del radar turístico o áticos con acceso privado se convierten en el nuevo símbolo de estatus.

Este tipo de operaciones no solo responden a criterios de estilo de vida. Septiembre marca el inicio del último trimestre del año, y con él, una carrera fiscal para cerrar operaciones antes del cierre contable. No es casualidad que, en 2024, entre septiembre y diciembre se registrara un 18% más de compraventas que en el resto del año.

OPORTUNIDAD Y PROBLEMA

Desde el punto de vista económico, este auge del lujo inmobiliario podría leerse como una buena noticia: inversión extranjera, dinamización del mercado y empleo en construcción. Sin embargo, el fenómeno también genera tensiones y consecuencias menos visibles, especialmente en territorios donde la presión de la demanda internacional está desplazando a la población local.

Lujo Merca2.es
Vivienda de lujo. Foto: Europa Press.

Los casos de Ibiza o Málaga es paradigmático: la presencia masiva de compradores extranjeros de alto poder adquisitivo ha disparado los precios, no solo del mercado de lujo, sino del mercado general. En muchos pueblos y barrios, los precios han subido más de un 30% en los últimos cinco años, mientras los salarios apenas han crecido.

Esto ha provocado un fenómeno creciente de ‘gentrificación rural’, donde los residentes de toda la vida no pueden competir ni alquilar ni comprar, y donde los servicios básicos —escuelas, sanitarios, personal del sector turístico— comienzan a escasear por falta de vivienda asequible.

Además, no todas estas operaciones tienen el mismo impacto. Muchos compradores internacionales no residen de forma habitual en España, sino que adquieren estas propiedades como inversión o para pasar temporadas cortas. Esto implica casas vacías buena parte del año, mientras crece la lista de espera para acceder a alquileres o VPO en las mismas zonas.

DEBATE PENDIENTE

Países como Canadá o Nueva Zelanda ya han impuesto restricciones a la compra de viviendas por parte de no residentes. Incluso Portugal, pionero en atraer inversión extranjera mediante incentivos como el ‘Golden Visa’, ha empezado a aplicar frenos tras constatar los efectos en el mercado local. En España, sin embargo, el debate apenas se ha abierto pese a que también eliminó las ‘Golden Visa’.

Las ventajas fiscales, la facilidad para abrir cuentas o constituir sociedades, y la ausencia de límites a la inversión extranjera siguen actuando como reclamos. Esto ha convertido al país en un paraíso para el capital inmobiliario global, pero también en un territorio cada vez más tensionado.


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