Si existe un plato que simboliza la elegancia, tradición y técnica milenaria de la cocina china, ese es sin duda el pato laqueado a la pekinesa, también conocido como Peking Duck. No se trata solo de un plato; es un ritual gastronómico que combina historia imperial, piel crujiente irresistible y elegante presentación. Vamos a descubrir juntos cómo recrearlo en casa con todo el mimo de los grandes restaurantes de Pekín.