Los gambones al ajillo son un plato tradicional de la cocina mediterránea, especialmente popular en España, donde el marisco tiene un lugar destacado en la gastronomía. La técnica de saltear mariscos en aceite de oliva y ajos es un método antiguo que resalta los sabores naturales del marisco, mientras que el ajo aporta un sabor intenso y aromático.
Aunque no hay un origen documental exacto para este plato, es común encontrar preparaciones similares a lo largo de la costa española. El uso de ajo en la cocina mediterránea es un legado de la gastronomía antigua, y los mariscos han sido consumidos desde tiempos inmemoriales por pueblos costeros. El sabor del gambón y la mezcla con el ajo y el pimiento, combinados con el aceite de oliva, crean una explosión de sabores que lo ha establecido como un favorito en tapas y entrantes en toda España.
La simplicidad de esta receta, junto con su potencial para ser un platillo versátil, ha llevado a su popularidad en todo el mundo, donde se sirve en restaurantes de alta cocina y también en comidas familiares. El gambón al ajillo es un excelente ejemplo de cómo los ingredientes sencillos pueden crear un plato impresionante, lleno de sabor y apto para ocasiones especiales.
3Variantes del guiso de gambones

El gambón al ajillo es un plato versátil que admite diversas personalizaciones. Aquí tienes algunas ideas que puedes explorar:
1. Con mariscos mixtos: Añade mariscos como mejillones, almejas o calamares a la receta para un plato más abundante.
2. Gambones al ajillo con papas: Agrega cubos de papas previamente fritas o cocidas. Esto crea un plato más completo, perfecto para un almuerzo o cena.
3. Estilo cajún: Incorpora especias cajún a la mezcla para darle un toque picante y sabroso, si te gustan los sabores intensos.
4. Gambones con coco: Prueba añadir leche de coco al sauté para darle un giro tropical a la receta, fusionando sabores a mar con un toque exótico.